Deep Web o las cloacas de Internet

Con casi toda seguridad usted habrá oído hablar de la Internet Profunda o Deep Web, aquella parte de universo digital que automáticamente se asocia con todo lo perverso de la red en cantidades enormes. Es cierto que en esta parte, también conocida como oscura o invisible, se pueden comprar armas, es el medio que utilizan las redes terroristas y las mafias para comunicarse y los peores ciberdelincuentes campan a sus anchas. En la parte más profunda y asquerosa de esta parte de internet se pueden encontrar videos de asesinatos y violaciones, escenas de canibalismo, la posibilidad de comprar asesinos a sueldos o venta de drogas y medicamentos.

El periodista Jon A. sedano lo describe así en un artículo muy interesante sobre una investigación que realizó para El Comercio de Asturias: “Había escuchado multitud de leyendas urbanas antes de decidir investigar sobre este submundo: ¿Grupos de caníbales?, ¿tráfico de órganos, ¿vídeos snuff?, ¿asesinos a sueldo?, ¿venta de drogas y armas? Sí, sí, sí, sí y sí. Me crucé con todo ello, y para el pesar de la humanidad, esto solo era una pincelada de la realidad”. 

A este submundo de internet se le llama web profunda ya que los buscadores de internet, Google, Yahoo, Bing y otros, no pueden encontrar la información debido a que está vedada a sus motores de búsqueda. Se calcula, ya que las fuentes consultas no se ponen de acuerdo, que los navegadores convencionales solo ven entre el 5 y el 15% de lo que sucede en internet, como ustedes pueden comprobar una cantidad muy pequeña. Personalmente me decanto por una cifra más cercana al 15%.

Quiere decir esto que el resto es maligno. No necesariamente, incluso una parte de lo que está oculto no es malo. En primer lugar hay que saber que la potestad de lo que ven los buscadores está en el dueño de la web, que es quien decide que partes pueden leer y cuáles no. Por ejemplo, todas las páginas de contactos, de juego online y de ligar, en aras a la protección de la privacidad de sus clientes no se indexan en su totalidad, por lo que gran parte de su contenido está en la web profunda.

Por otra parte, algunas redes sociales no dejan indexar toda su web. Los gobiernos e instituciones tampoco dejan ver a los buscadores todos sus contenidos en aras a la seguridad, y por ejemplo, si este periódico quiere, cualquiera de sus secciones puede dejar de ser indexada, por lo que si no está en la web visible está en la oscura.

Más casos. Muchos activistas de países donde la libertad de prensa no está garantizada se ven obligados a utilizar la web oscura ya que los hace prácticamente ilocalizables. Les aseguro que la pena muerte ayuda mucho a usar la parte oscura de internet. La famosa página que ha revelado secretos de Estado y ha puesto en apuros a varios gobiernos, Wikileaks, también se nutre de estos servicios.

Hasta aquí lo bueno. Esto se encuentra en lo que se llama el primer nivel de la web profunda. Es a partir de esta capa hacia abajo donde ya se almacenan las miserias descritas. Esta parte oscura de internet funciona debido a que las webs no usan un nombre sencillo para su búsqueda, sino que utilizan nomenclaturas con extensión “.onion” que cambian de forma deliberada (por ejemplo, zqktlufz35chz7ne.onion), lo que hace muy difícil su rastreo ya que la IP de los usuarios cambia constantemente y no hay registros sobre los que poder actuar. La IP es el número que identifica a cada ordenador en la red y que en la llamada internet visible es muy fácil de localizar.

De hecho, si usted quiere saber cuál la IP de su ordenador aplicaciones como cuál es mi IP se lo dice de forma gratuita. Este submundo tiene su propio acceso por medio de una herramienta que se llama Tor, se utiliza como modo de pago una ciberdivisa llamada Bitcoin, muy complica también de rastrear y que siempre está asociada a transacciones de dudosa legalidad, y al igual que usted y yo usamos la Wikipedia para buscar información en internet en la web profunda también hay directorios, el más conocido es Hidden Wiki.

Entrar en esta parte de internet no es difícil, pero no se lo recomiendo bajo ningún concepto. Tampoco voy a explicar cómo. Si se atreve hay muchos sitios de internet que explican cómo hacerlo. En el mejor de los casos los piratas informáticos le van a dejar el ordenador hecho unos zorros, hágase a la idea de que es usted una gacela entre leones, y en segundo lugar lo que va a encontrar es delito y se pueden ver metido en un follón o no le va a gustar (y si le gusta hágaselo mirar) ya que es aquí donde pederastas y otros delincuentes, sexuales o no, se mueven a sus anchas.

Puede comprar tarjetas de crédito, asesinos a sueldos, pasaportes y documentos falsos, pirateo de todo tipo de cuantas, hakeo de servidores para empresas, ver violencia explícita, etc. Pero tenga en cuenta una cosa, puede ser el cazador cazado. Muchos de estos servicios buscan sacarle el dinero y adiós, está usted en un campo de piratas ante todo. Segundo, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, la Interpol y el FBI cada vez la vigilan más, si se topa con ellos mal asunto.