Un pueblo de Minnesota elige por tercera vez a un alcalde muy especial: un perro

Desde luego que muchas de las noticias que nos llegan desde los Estados Unidos no dejan de sorprendernos pero esta que ahora les contamos en ESdiario seguro que guarda la capacidad de dejarles estupefactos.  

La noticia está fechada en Croman, un pequeño pueblo del Estado de Minnesota que cuenta tan sólo con 1.039 habitantes y que -haciendo un símil con la política española y la posibilidad de llegar a unas terceras elecciones- deben estar muy cansados con los políticos locales porque desde hace tres legislaturas (en estos asuntos locales son de un año de duración) han elegido a un más que original alcalde, un perro.

Duke, que es un perro raza Gran Pirineo que lleva ocupando el cargo de alcalde en Croman desde 2014. En aquellas elecciones, el perrito Duke se enfrentaba contra el candidato humano Richard Sherbrook, quien únicamente obtuvo 12 votos. Tal y como explica el prestigioso rotativo americano USA Today y que les cuenta ESdiario, el resto e incluso el voto de Sherbrook, fueron para Duke. 

Desde entonces, Duke ya ha ganado tres veces consecutivas las elecciones, así que tan mal no lo estará haciendo o que los habitantes de lo que a buen seguro será una peculiar localidad no quieren ver ni en pintura a un político de los tradicionales, esto es humanos.

Según aclara el USA Today, en estas últimas elecciones, el Gran Pirineo ha ganado por arrolladora mayoría absoluta, menos mal porque una mesa negociadora sería curiosa de verdad, si bien es cierto que la elección de alcalde en Estados Unidos es directa y no proporcional. Da igual, no hay debate sobre esto porque según el escrutinio final todo el pueblo ha votado en su favor, sólamente se le ha resistido un elector: algún vecino ha votado a la novia de Duke, Lassie. Todo queda en casa. 

Se da la circunstancia de que Duke es un perro de origen español. Pastor por naturaleza, el Gran Pirineo,  también conocido en español como Montaña de los Pirineos es una raza de perro grande y majestuosa, usada tradicionalmente para proteger ganado en los pastos (especialmente a las ovejas) y como perro guardián. Otra curiosidad de este cánido -ahora que se acercan las elecciones en el País Vasco- es que es también una de las razas más antiguas documentadas, empleada durante casi un milenio por los pastores vascos, de donde adoptó el nombre. Debido a su tamaño y apostura, ha sido el perro oficial de la corte francesa hasta la desaparición de la misma durante la Revolución francesa.