| 19 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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El Ibex 35 ya presiona a Rajoy.
El Ibex 35 ya presiona a Rajoy.

Pinza a Rajoy: los interesados en que el PP sea rehén de Pedro Sánchez

Arrecian las presiones al candidato de los populares por varios frente. Desde su entorno se afirma que “nunca se va a dejar liar con este tipo de juegos políticos”. No hay más que hablar.

| Antonio Martín Beaumont Opinión

Mariano aguantará. El Partido Popular, ya veremos”. Así resumía un cargo de La Moncloa el escenario abierto una vez que la pelota de la investidura ha caído en el tejado de Pedro Sánchez. Y si no lo consigue, contando con la obstinación de Pablo Iglesias de renegar de un “club” del que forme parte Albert Rivera  y viceversa, ahí estará Rajoy, claro, para recoger los frutos. Porque la cuentas del líder popular prevén encontrarse entonces a Sánchez (débil, fracasado, convertido en cadáver político) con un PSOE detrás con más miedo a unas elecciones anticipadas que a un tornado. Es decir, con el terreno abonado para que a los barones socialistas no les quede más remedio que forzar a sus diputados a abstenerse para que haya Gobierno en minoría del PP con el apoyo de Ciudadanos

Las dudas ante la estratégica cesión del paso protagonizada por el ganador de las elecciones inundan al centro-derecha. La de Mariano Rajoy es su apuesta más que arriesgada. Naturalmente. Y con ella, de momento le toca a él bailar con la más fea. Además, con toda la orquesta en contra. Porque al presidente del PP le corresponde estas semanas desafiar las presiones, las ya recibidas y las que aún quedan por venir. Presiones tanto desde algunas cancillerías europeas como, sobre todo, del Ibex 35. De hecho, fuentes populares consultadas señalan que “ya se han empezado a notar” en torno a mandatarios del partido. El objetivo: lograr la abstención del PP para facilitar un Gabinete PSOE-Ciudadanos que frene la tentación de Pedro Sánchez de caer en manos del radicalismo de Podemos y los partidos independentistas.

El argumento que se esgrime es que un pacto a tres en torno a Sánchez daría una señal de confianza a los mercados. Porque los inversores tendrían la certeza de que el Gobierno de PSOE y C’s, aun sin ministros populares, entraría dentro de los parámetros razonables apoyados por el PP. Igualmente, se destaca que eludir tal escenario aislaría a los populares en las Cortes y los colocaría ante la opinión pública como el partido del “no” permanente. Incluso cuando está en juego el interés nacional. En buena medida, según lamentan VIP populares, Rivera le hace el juego al secretario general socialista con su continuo llamamiento “al sentido de Estado”. Este miércoles, el portavoz de Ciudadanos, Juan Carlos Girauta, fue un paso más allá al afirmar que “le juzgará el pueblo y la Historia” a Rajoy si permite al PSOE gobernar con Podemos en lugar de favorecer un Gobierno constitucionalista. 

¿Pinza de Sánchez y Rivera para que Rajoy no tenga más remedio que tragar la amarga medicina de la abstención? En la cúpula del PP no tienen dudas de que así es. Máxime cuando afirman tener constancia de que el líder del PSOE y el de Ciudadanos han intercambiado estas últimas semanas numerosas llamadas. Sin embargo, el presidente del Gobierno en funciones está decidido a esquivar estas pretensiones. Desde su entorno se afirma que “nunca se va a dejar liar con este tipo de juegos políticos”. La negativa de Sánchez al diálogo y el fracasado deseo de la izquierda de instrumentalizar un hipotético debate de investidura del líder popular para laminar al centro derecha, bastan a Rajoy como argumentos para negarle ahora al PSOE el pan y la sal. El PP no va a contribuir a dar oxígeno a un Pedro Sánchez al que se considera “fuera de la realidad” y, por ello, “un peligro” para España. “Si otros lo hacen, será su responsabilidad, la nuestra está clara”, avisan desde Génova 13.