El inesperado y sorprendente reencuentro entre Isabel Pantoja y Julián Muñoz

Hace mucho, mucho tiempo que Isabel Pantoja y Julián Muñoz no se han visto en persona. Lo suyo empezó como un ligero temblor que acabó en terremoto escala diez. Historia de la Historia más cañí que ocupó horas y horas en los medios. Y lo que te rondaré morena, pues el suyo es un culebrón que todavía no ha finalizado. Habrá reencuentro. Será el próximo 5 de mayo cuando la tonadillera y el exalcalde de Marbella se vean las caras. Y lo harán con motivo de un juicio que se celebrará en Madrid a propósito de una carta que se leyó en el finiquitado DEC  donde Pantoja se dirigía a Julián. Se trataba de una misiva íntima donde la tonadillera desnudaba su alma ante Muñoz. 

Ni a Isabel ni a Julián les hizo gracia alguna que se hiciera público este documento y dieron indicaciones a su letrada de entonces para que tomara medidas legales. Se trata de una querella por un presunto delito de revelación de secretos, que se interpuso en el año 2007 y cuyo juicio ha sido señalado para el próximo 5 de mayo. En un principio, solo estaban imputados Antena 3, Cuarzo, productora del desaparecido DEC, y el director del programa. Sin embargo, posteriormente, la parte demandante añadió a Jaime Cantizano y María Patiño, tanto el presentador como la periodista han evitado pronunciarse sobre este desagradable asunto. 

Isabel no quiere que haya un encuentro con Julián porque todavia no ha perdonado ni olvidado

Cuando ocurrieron los hechos relatados, Pantoja y Muñoz encargaron su defensa a Graciela Otondo, quien hace años que no tiene nada que ver con ellos. Fue Graciela quien marcó los pasos legales a seguir. El testigo lo recoge Cynthia Ruiz, experimentada letrada en temas de Derecho al Honor, Penal, Civil y Fiscal. Es en ella en quien Isabel ha depositado sus asuntos legales. Tan contenta está la artista con el buen hacer de la abogada que ha querido que sus hijos también estén representados por ella. 

Si hay algo que Isabel no desea que se produzca es un encuentro con Julián. Acabaron fatal y ni uno ni otra quieren verse en persona bajo ninguna circunstancia, y menos en el juzgado. Así las cosas, no sería extraño que ambas partes, cada uno por su lado, intentaran paralizar el proceso. El 5 de mayo tendremos la respuesta.