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Doña Letizia vapuleada en la prensa por su turbia relación con los Gómez-Acebo
Una escandalosa columna revela que la relación de la reina con la familia política de Don Felipe deja mucho que desear desde que se descubrieran los motes con los que se referían a ella.
La animadversión entre la reina Letizia y la familia Gómez-Acebo viene de lejos según los cronista de la realeza que estos días corroboran la verdad que destapó Paloma Barrientos en su columna para Vanitatis. Y es que la relación entre ambas ramas de la familia no es que sea buena o mala, es que simplemente es inexistente porque así lo ha querido la esposa de don Felipe.
A la reina no le ha hecho falta "saltarse" el cumpleaños de la Infanta Pilar para demostrar que no tiene ningún interés en relacionarse con ellos y tampoco va a provocar que sus hijas lo hagan. Para doña Letizia "los primos tienen una actitud laboral y profesional poco brillante", tal y como escribe la periodista en su escandalosa columna.
Tampoco le pareció de buen gusto que el nombre de la matriarca, doña Pilar, apareciera en los Papeles de Panamá ni que Fernando abuse del "no sabes con quién estás hablando" contra quien le recrimina sus actos.
Pero la razón del distanciamiento tiene unos motivos más profundos. Según Barrientos, durante los primeros años del matrimonio, doña Letizia descubrió que el círculo más íntimo de su marido se refería a ella como "la jolines" o "la periodista" y que sus primos le recriminaban a don Felipe los comentarios sobre los regalos de navidad que le hacían de buen agrado.
Las conductas de doña Letizia crispaban a los Gómez-Acebo y ante esa falta de entendimiento mutuo, la reina prefirió alejarse lo más posible de ellos. En palabras de Barrientos: "les borró de su mapa afectivo".
