¡Tomemos las plazas!: Los 12 mejores mercados de abastos de España

No hace tanto tiempo que los mercados de abastos eran el punto de encuentro de la gente de cualquier pueblo, barrio o ciudad de la geografía española. Ahora muchos han desaparecido pero aquí seleccionamos 12 que todavía mantienen la esencia inicial. 

1. Mercado de la Boquería, Barcelona

Foto: Flickr

Fue inaugurado en 1840 en la Rambla de Barcelona para sustituir a los mercados ambulantes que se montaban en la parte vieja de la ciudad condal, y su estructura y situación lo han convertido en una parada obligatoria para vecinos y turistas. Está formado por más de 300 puestos en los que se puede encontrar desde los alimentos más básicos como pescado, carne o verduras, hasta productos exóticos que llaman la atención a quien pasea por sus estrechas callejuelas. En su interior se realizan actividades culturales para los barceloneses.

2. Mercado de la Ribera, Bilbao

Foto: Facebook

El arquitecto Pedro Ispizua construyó este edificio de 10.000 metros cuadrados en 1929 en el sur del casco viejo de Bilbao, junto a la ría. Unos amplios ventanales dan cobijo a los puestos entre los que predominan los productos del mar y de la huerta frente a la carne. Los bilbaínos se pueden beneficiar de su servicio de compra online que acerca los productos del mercado a casa. En 1990 fue nombrado por el Guiness de los Records como el mercado municipal de abastos más completo.

3. Mercado de abastos de Barbate, Cádiz

La importancia de la pesca en Barbate ha convertido este mercado en un referente en productos del mar, pese a no ser de gran tamaño. En los puestos se puede encontrar todo tipo de pescados pero sus especialidades son el romerete, que es similar al mero, y el lobito o marrajo. También destaca por la calidad del atún rojo de almadraba, los calamares de potera y el amplio surtido de pescados de roca.

4. Mercado de abastos de Jerez, Cádiz

Foto: Jerez Siempre

Este mercado, conocido por los jerezanos como "La Plaza", está situado en un histórico edificio neoclásico. Fue construido sobre el antiguo convento de San Francisco y remodelado en 1885 por el arquitecto José Esteve. En la actualidad cuenta con más de 100 puestos en donde se puede adquirir pescado fresco que llega directamente desde Sanlúcar de Barrameda, entre otros productos.

5. Mercado de abastos de Santiago, A Coruña

Foto: Solmar.es

Considerado uno de los cinco mercados más importantes de toda España aúna los comercios tradicionales con dos restaurantes-cafeterías, una de ellas prepara los productos comprados en los locales. Sigue cumpliendo su función de plaza del pueblo y diariamente reúne a cientos de vecinos que acuden a sus puestos de pescado, marisco, verdura o carne. El edificio se construyó a mediados de los años 40 en la misma localización que el mercado original, hoy en día está gestionado por una cooperativa formada por 70 personas. Es el segundo lugar más visitado de la capital gallega, solo por detrás de la Catedral. 

6. Mercado de San Blas, Logroño

Foto: Mercado de San Blas.

El arquitecto Fermín Álamo levantó en 1927 este mercado sobre el solar de la iglesia de San Blas, de ahí su nombre. A lo largo de los años se ha renovado y adaptado a las necesidades de cada momento, y en 1987 fue reformado casi por completo. Los vecinos pueden encontrar todo tipo de alimentos y disfrutar de las múltiples actividades culturales que se realizan en su interior.

7. Mercado de San Miguel, Madrid

Foto: Mercado de San Miguel

Este mercado, situado junto a la Plaza Mayor de Madrid, es considerado uno de los mejores de la capital. Su renovación en 2009 modificó también su oferta de puestos mezclando algunos para comprar con otros para pararse a comer. Los precios son más elevados que en otros mercados y no están al alcance de todo el mundo, pero es perfecto para hacer alguna parada de forma puntual.

8. Mercado de La Paz, Madrid

Foto: Tripadvisor

En 1878 se levantó este edificio de estilo modernista en el barrio de Salamanca. En la actualidad presume de ser un referente en alimentos de calidad y tener un servicio cercano con los clientes que poco se parece al de las grandes firmas de la vecina Calle Serrano. Es el único mercado construido en el siglo XIX en Madrid que se mantiene activo como tal.

9. Mercado Central de Salamanca

Foto: Mercado Central de Salamanca

En 2015 se hizo un lavado de cara a este mercado que abrió sus puertas en 1909 junto a la Plaza Mayor salmantina, con el que trataron de devolverle a este lugar la importancia que se merece dentro de la localidad. Cuenta con gran variedad de productos frescos y actividades culturales que reúnen a los vecinos en este histórico edificio. 

10. Mercado de la Esperanza, Santander

Foto: Gastronofilia

Eduardo Reynals y Juan Moya fueron los arquitectos encargados de levantar este edificio en 1897 con piedra, hierro y vidrio. Su construcción les permitió ganar la Medalla de la Real Academia de las Bellas Artes de San Fernando y en 1977 el edificio fue declarado monumento histórico-artístico. Actualmente tiene 80 puestos abiertos dedicados a la venta y con una gran variedad de productos.

11. Mercado Central de Valencia

Situado en el centro de la ciudad, sorprende por su belleza y el techo acristalado en forma de bóveda de 30 metros de altura. La calidad de sus productos frescos como las anguilas vivas, las verduras y hortalizas de la huerta, el jengibre o todo tipo de pescados y mariscos, lo han situado a la cabeza de Europa. Es además un pionero, ya que fue el primer mercado del mundo que se informatizó.

12. Mercado Central de Zaragoza

Se levanta en el mismo lugar que ocupaba el mercado local desde el siglo XIII y está declarado Monumento Histórico y Bien de Interés Cultural. El arquitecto Félix Navarro Pérez construyó su estructura con armado metálico imitando la de la Torre Eiffel. En 1986 fue reformado para poder mantener la actividad inicial y actualmente cuenta con 190 puestos en la primera planta y un espacio en la segunda destinado a la organización del propio mercado. Pero además, la Asociación de Detallistas del Mercado Central trata de revitalizar este lugar con actividades culturales como exposiciones, conferencias o conciertos.