| 06 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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La bandera nacional.
La bandera nacional.

¡Viva España!

Todos sabemos que aquellos que hoy berrean y reniegan de nuestra patria, lo hacen porque quieren implementar una patria comunista cochambrosa y odian que seamos un país envidiable.

| El Libre Pensador Opinión

Como cada 12 de octubre los españoles celebramos nuestro día nacional. Un día que viene a ser un reconocimiento a todos los que han hecho grande este país y nos han convertido en una de las grandes economías mundiales, permitiendo que tengamos un nivel de vida superior a más del 87% del resto del mundo. España es tragicómica, desesperante, extenuante, inoperante, lenta, perezosa, indolente, desmedida, quejosa, etc. Pero a pesar de todas esas características, y de muchas otras que no he citado, es un grandísimo país.

Se ha convertido en una tradición escuchar la berrea de los analfabetos funcionales y sus continuos ataques e insultos a cualquier símbolo que nos representa. De poco sirve explicar a esa turba iletrada que la bandera española pasó a ser rojigualda a través de un Real Decreto aprobado por Carlos III en 1785 para la Marina de Guerra, aunque no sería hasta 1843 cuando se convirtió en la bandera oficial del Reino de España. Carlos III tenía muchas cualidades, pero ahora me entero que poseía el don de predecir el futuro e intuía que Franco tomaría el poder 154 años más tarde. De poco sirve explicar a los que no quieren saber, sólo balar las soflamas de cuatro trasnochados, que España no se dedicó a aniquilar per se a todos los indígenas. El comportamiento fue en muchos casos menos violento que el esperado por parte de una potencia conquistadora europea del siglo XVI, de hecho, por poner un ejemplo, en Argentina los indígenas fueron vilmente asesinados por los militares argentinos en el siglo XIX y no por españoles.

Es estéril intentar explicar a estos indigentes intelectuales que no se instauró la esclavitud y que la misma  Isabel ‘la Católica escribió en 1503 un manifiesto en defensa de los indígenas: "Mando a vos, el dicho nuestro gobernador, que hagáis pagar a cada uno, el día que trabaje, el jornal y mantenimiento que según la calidad de la tierra y de la persona y del oficio vos pareciere que debiere haber. Que lo hagan y lo cumplan como personas libres, que lo son, y no como siervos, y hacer que sean bien tratados. No consistáis ni deis lugar a que ninguna persona les haga mal ni ningún daño u otro desaguisado alguno".

Pero el pueblo español, excesivamente acomplejado, reniega de su historia, de su cultura, de su idioma, de su forma única de vivir la vida, de sus logros y de sus fracasos. España no es Liberia por mucho que algunos indeseables quieran trasladarnos un mensaje de vivir en un país perverso y maléfico. Tenemos un sistema sanitario que lidera la inmensa mayoría de los ránquines, nuestra esperanza de vida es la más alta del mundo (83 años) sólo por detrás de Japón. Nuestro sistema educativo permite estudiar a todo el mundo y garantiza mediante becas, el año pasado récord histórico de becas concedidas, la posibilidad de estudiar a aquellos que sufren problemas económicos. Nuestra envidiable gastronomía, nuestro clima privilegiado y nuestro carácter hace que cada año recibimos a más de 65 millones de turistas. Nuestras Fuerzas Armadas arriesgan su vida a diario, tanto en España como en terceros países, en misiones humanitarias y de paz, por nosotros. Nuestros cuerpos y fuerzas de seguridad nos permiten vivir en uno de los países más seguros de Europa consiguiendo que la tasa de delincuencia y criminalidad cada año sea más baja.

Todos sabemos que aquellos que hoy berrean y reniegan de nuestra patria, lo hacen porque quieren implementar una patria comunista cochambrosa y odian que seamos un país envidiable en muchísimos aspectos. Les da rabia ver como su mezquino mensaje, de momento, no ha conseguido calar lo suficiente como para alcanzar su sueño de ser los "caudillos" de España, aunque ello signifique convertirnos en un país miserable. Somos un grandísimo país a pesar de todas las cosas negativas que tiene España actualmente. Debemos estar orgullosos de nuestro pasado, de nuestro presente y luchar unidos por nuestro futuro.

En definitiva, más allá de la ideología que podamos tener cada uno, de nuestras creencias, de nuestras costumbres, de nuestras tradiciones, de nuestra forma de ver la vida, más allá de todo lo que nos diferencia hay algo que nos une a todos los españoles y eso es nuestra milenaria historia, nuestra cultura, nuestra lengua, nuestra nación. Todo ello lo representa el 12 de octubre.

Así pues, sin ningún tipo de complejo….

¡Viva España!