| 26 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Alberto Garzón y Pablo Iglesias, cuando oficializaron su alianza.
Alberto Garzón y Pablo Iglesias, cuando oficializaron su alianza.

Vuelan cuchillos contra Garzón: dirigentes de IU preparan un ajuste de cuentas

Doce meses después de situarse al frente de la formación, el coordinador general ha puesto Izquierda Unida patas arriba. Y sus enemigos internos, reforzados, le van a pasar la factura.

| J.R.V España

En apenas un año al frente de Izquierda Unida, Alberto Garzón ha logrado convertir la federación comunista en un polvorín, firmar un descalabro electoral en votos y escaños en las últimas elecciones generales y dejar reducida prácticamente a la nada su visibilidad en el mejor escaparate posible: el Congreso de los Diputados.

Por ello, el coordinador general llega a la Asamblea Federal de éste sábado con un terremoto interno creciente, enfrentado a sus dos antecesores, Cayo Lara y Gaspar Llamazares, y con centenares de dirigentes y exdirigentes levantados en armas contra Garzón, al que denominan despectivamente el "liquidador".

Tal vez por eso, poniéndose la venda antes de la herida, Garzón ha filtrado un documento estratégico en el que reconoce la pérdida de "visibilidad" de IU, pero en el que endosa -según su equipo de "análisis electoral"- el descalabro del 26J a Podemos.

Como ya adelantó en noviembre pasado ESdiario -y aún no se había producido la segunda cita con las urnas-, un centenar de exdirigentes de IU suscribieron un manifiesto que ha servido de aglutinador de los críticos, que éste sábado alzaran su voz.

"Hoy constatamos que el proyecto que nació hace 30 años bajo las siglas de IU ha sido liquidado, cuando hace tan solo unos años esta formación disponía de una sólida representación social e institucional", exponía el manifiesto político que ahora se vuelve a enarbolar en la formación.

Por si fuera poco, como también reveló ESdiario este martes, ha saltado por los aires la alianza entre Podemos e IU (Ganemos) en Ahora Madrid.

Las bases moradas se han rebelado con la no dimisión de los concejales Celia Mayer y Carlos Sánchez Mato, tras ser imputados por prevaricación y malversación de fondos públicos. Ganemos es un invento de Garzón tras disolver Izquierda Unida Madrid, donde militaban sus críticos internos.

Uno de los mayores enemigos internos de Garzón,  Gaspar Llamares, ha pedido en las últimas horas a su sucesor que "deje de quejarse y de llorar sobre la lecha derramada". Y su corriente, Izquierda Abierta, reclama la ruptura con Podemos.

De hecho, Llamazares lleva varios meses redoblando sus esfuerzos en el lanzamiento de Actúa, al que ha vinculado a históricos de IU, como Cristina Almeida, y también al exjuez Baltasar Garzón. Actúa tiene la vista puesta en las elecciones municipales de 2019.

Con este escenario, a Garzón este sábado le espera un terremoto interno con muchos cuchillos preparados para volar.