Caso Villar: García entra como un ciclón en La Sexta y deja helada a Pardo

El mundo del fútbol está en estado de shock tras la detención de Ángel María Villar, su hijo Gorka y el vicepresidente de la Real Federación Española de Fútbol por presuntos delitos de administración desleal, apropiación indebida, corrupción entre particulares y falsedad documental, entre otros.

A medida que pasan las horas la UCO va ampliando los registros, como si se tratara de la onda expansiva de un terremoto. Estos empezaron en la sede de la RFEF, la Federación Tiñerfeña de fútbol, sedes de empresas y varios domicilios privados vinculados a los detenidos; y después los agentes de la Guardia Civil entraron también en las federaciones de la Comunidad Valenciana y Baleares.

"Es un hombre honrado y parto de la base de su inocencia", señaló de Villar el expresidente del FC Barcelona Joan Gaspart, que está llamado a sustituirle de forma temporal al frente de la RFEF. El de Gaspart no es el único mensaje de prudencia y hasta de apoyo que ha llegado desde los clubes al que hace solo dos meses fue reelegido por octava vez.

Sin embargo, los periodistas deportistas no están siendo tan condescendientes con Villar, a quien algunos como José Ramón de la Morena tenían especiales ganas por haber hecho de la Federación su "cortijo", decía este martes.

Pero hay -al menos- una excepción: José María García. Por la amistad que le une con Cristina Pardo (quien empezó a su vera), el veterano periodista entró como un ciclón en Al Rojo Vivo para hacer una encendida defensa de Villar con la que se hizo el silencio en el plató de La Sexta.

García se declaró amigo del presidente de la RFEF y defendió su "seriedad, honradez y rigor" de éste, por lo que pidió "esperar y no adelantar acontecimientos".

"Creo en Ángel María Villar y si Ángel María Villar ha hecho el 10% de lo que vosotros habéis dicho esta mañana le retiraré el saludo y se habrá acabado para mí. Pero de momento tiene mi apoyo, mi sangre y si lo necesita mi dinero", proclamó García.