| 28 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Puigdemont, este lunes, durante la presentación de la nueva Agencia de Ciberseguridad de Cataluña.
Puigdemont, este lunes, durante la presentación de la nueva Agencia de Ciberseguridad de Cataluña.

Puigdemont recurre a hackers rusos para la guerra sucia de Internet

Como si de un "thriller" se tratara, la batalla entre el Estado y la Generalitat también se juega -y de forma decisiva- en el lado más opaco de la tecnología. Estos son sus "ejércitos".

| Javier Ruiz de Vergara España

"Estamos preparados. Ya hemos demostrado en el pasado que nuestra capacidad de respuesta a ataques es muy buena, pero el riesgo cero no existe, porque los que atacan también aprenden". Con esta frase, Carles Puigdemont concluyó este lunes un acto que ha pasado prácticamente desapercibido en los medios que siguen el minuto a minuto del procés: la inauguración de la denominada Agencia de Ciberseguridad de Cataluña. Un organismo clave en la arquitectura que los secesionistas han diseñado para su república independiente que debe nacer el 2 de Octubre.

Cuando el presidente de la Generalitat pronunció estas palabras ante el jefe del ciberespionaje catalán, Jordi Puigneró, estaba refiriéndose entre líneas al hackeo masivo que la Generalitat lleva temiendo -y en parte padeciendo- varios meses, el de los agentes del Centro Nacional de Inteligencia. Y es que, a diferencia del operativo puesto en marcha por el Ministerio del Interior -improvisado de forma chapucera, según han denunciado los propios policías y guardias civiles- los Servicios de Inteligencia llevan desplegados en Cataluña varios meses.

En concreto, el departamento que dirige el general Félix Sánz Roldán ha desplegado en Cataluña a sus expertos más reputados -civiles y militares- en programación y desencriptación, y, también, algunos de sus hackers colaboradores.

El CNI sospecha que los secesionistas están contando con el apoyo de expertos en telecomunicaciones israelíes y de hackers rusos. 

La Generalitat teme del CNI una batalla integral en la web oscura y en las comunicaciones de todo tipo, vía telefónica, email, intranets de la administración autonómica y redes sociales. De hecho, el propio Puigdemont insinuó el pasado jueves que su cuenta de Twitter estaba siento objeto de un hackeo.

En este sentido, las operadoras de telecomunicaciones han recibido este mismo martes un nuevo mandamiento para bloquear otros 22 dominios web que publicitan el referéndum. El objetivo del mandamiento es bloquear el acceso a los dominios creados tras el bloqueo del pasado día 15 de la Guardia Civil sobre diez páginas web. Estos 22 nuevos dominios, incluyendo las web proxy que sirven como intermediarias, deben redirigir a una web de bloqueo ya establecida y administrada por el Instituto Armado.

El acto de este lunes, el secretario de Telecomunicaciones de la Generalitat, Jordi Puigneró, reveló un dato clave: durante la primera quincena de septiembre ha aumentado un 200% el número de ciberataques registrados por la Generalitat" pero, añadió, "la mayoría, de baja intensidad". La cita clave en esta batalla se producirá el propio 1-O si finalmente hay urnas. Y el objetivo prioritario: el escrutinio oficial del referéndum.

 

El director general del CNI, Félix Sanz Roldán, ha diseñado un operativo específico para el 1-O.

 

El presupuesto de la Generalitat en materia de ciberseguridad para 2017 es de 7,5 millones de euros, más del doble de las partidas de los últimos años. La nueva Agencia de Ciberseguridad de Cataluña emplea a 120 personas, entre personal propio y los que prestan empresas y proveedores.

El CNI sospecha, en este sentido, que los secesionistas están contando con el apoyo de expertos en telecomunicaciones israelíes y de hackers rusos. Y, por si fuera poco, en las tropas del secesionismo se ha alistado el gurú de las filtraciones internacionales, Julian Assange.