La hipótesis a la que se aferra el PP alumbra el desenlace más precario

A escasas horas de que Pedro Sánchez se reúna con Mariano Rajoy, y con satisfacción tras la reunión con Albert Rivera, en el PP comienza a instalarse con más fuerza que hace una semana la hipótesis de una nueva cita con las urnas. “Si nada cambia—se señala desde la dirección de Génova—habrá nuevas elecciones”. Tal y como adelantó ESdiario el pasado mes de junio, Rajoy acudirá a la investidura aun cuando no tenga los apoyos necesarios garantizados de antemano.

“La reunión con Rivera ha ido bien, se ha roto el hielo. El ambiente ha sido cordial y objetivamente estamos mejor que ayer, pero el fondo del asunto es el mismo de siempre. O hay abstención del PSOE o vamos a elecciones, no hay otra, salvo que la propia izquierda intente una alternativa”.

El PP da como muy probable que en la primera votación de investidura, Ciudadanos vote en contra y se abstenga en la segunda “ a no ser que en el ultimo momento opte por el si, pero Rivera ha sido muy claro y lo realista es pensar en esa primera votación en contra y abstención en la segunda votación y el PNV, quizás también pueda abstenerse pero no tomará una posición clara hasta después de las elecciones autonómicas”.

Los populares, que han encontrado alivio tras la reunión con Rivera, sostienen que “aunque votara a favor, que sería muy bueno, la abstención del PSOE seguiría siendo necesaria. No es una estrategia de presión, es que las matemáticas parlamentarias son las que son”.

Rajoy lo tiene claro: no habrá marcha atrás

En cualquier caso, y así lo reiteran fuentes de absoluta solvencia y tal como adelantó ESdiario el pasado 27 de Junio, Mariano Rajoy se someterá a la investidura a sabiendas de que puede perderla. La primera votación se da por amortizada porque es seguro que el candidato popular saldrá derrotado “pero en este asunto no hay marcha atrás y mucho menos después de la posición expresada por Rivera. Rajoy acudirá a la investidura, explicará sus propuestas y hay que insistir en que si nada cambia, habrá nuevas elecciones”.

Este escenario no quiere ni ser contemplado por el PP ni tampoco por el propio Rivera, pero “con las cartas que hay encima de la mesa en estos momentos no hay motivos para descartarlo”. Se añade desde Génova que en ese supuesto “nosotros no seríamos los más perjudicados, ni mucho menos, pero no son momentos de cálculos electorales, sino de sacar adelante el país”.

La decisión de Rajoy esta tomada: acudir a la investidura aunque sea en precario

La conversación con Pedro Sánchez, es sin duda, la más importante de todas las mantenidas por Mariano Rajoy pero al mismo tiempo es la conversación en la que menos esperanzas tiene el PP. Se reconoce que el PSOE “se ha implicado de manera muy fuerte en el no” y tienen casi la certeza de que la reunión Rajoy-Sánchez nada va a salir. “Lo primero que tenemos que ver es cuanto tiempo dura”.

De momento no hay fecha cerrada para la investidura. Mañana mismo todas las formaciones políticas recibirán el documento de propuestas y de reformas que el PP pondría encima de la mesa para lograr acuerdos y “a partir de ahí, hay margen para nuevos contactos e incluso para formar equipos de negociación pero antes será necesario saber la posición de los demás. Si hay un partido dispuesto a negociar, en horas estamos listos para afrontar la negociación sobre cuestiones concretas”.

La única aspiración ahora, un gobierno en minoría

No obstante, en el PP no se tiene especial optimismo y “hay que seguir trabajando y viendo como van las cosas. Siempre hemos sabido que no iba a ser fácil y realmente no lo es aunque Rajoy esté dispuesto a gobernar en minoría”, extremo este también adelantado por ESdiario. Siendo realistas, es a lo más que en estos momentos podemos aspirar”.

En estos momentos y salvo que en los próximos días se produzcan acercamientos, ya nadie se atreve a afirmar con contundencia que pueda haber gobierno en los primeros días de agosto. Los más pesimistas no descartan que haya una nueva investidura a la vuelta de verano “porque no se puede descartar nada”. A partir de ahí, todas las posibilidades quedan abiertas, incluida la de que a esta eventual segunda investidura Mariano Rajoy volviera a ser candidato “a no ser que Pedro Sánchez logre una mayoría de izquierda, cosa a la que el PSOE también se ha negado”.

La fecha cierta continua siendo la del día 19, que es cuando se constituyen las Cortes. Cara a la formación de la Mesa ya se han iniciado los contactos, al margen de las conversaciones de Rajoy, y en el PP se mantiene la posición, indicada en estas páginas hace una semana, de ceder a Ciudadanos un puesto en la Mesa. Lo contactos para la formación de la Mesa se están llevando a cabo en el estricto ámbito de los portavoces parlamentarios y aunque continua sin haber confirmación oficial, todo apunta a que el nombre de Garcia-Margallo es una apuesta “fuerte” del PP para la presidencia de la Cámara.