Surgen las primeras desavenencias en C´s por el entusiasmo de Rivera con Sánchez

La formación de Albert Rivera está empezando a darse cuenta de que su estrategia de no querer entrevistarse a solas ni con el PP ni con Mariano Rajoy es absurda y poco rentable. Mientras ve cómo Pedro Sánchez sí se reúne y coquetea con Pablo Iglesias buscando en el fondo su particular estrategia de cara a las previsibles elecciones del 26 de junio; mientras comprueba cómo el líder socialista intenta aparecer como la persona que dialoga con todos y que es capaz de plantear la rocambolesca coalición de gobierno de PSOE, Ciudadanos y Podemos; mientras Sánchez y el PSOE escenifican reuniones con C´s y Rivera antes de cualquier encuentro con Podemos para dejar claro que “primero son ellos”; mientras todo el paripé continúa, Albert Rivera está cayendo en la cuenta de que le falta poco para convertirse o bien en el “novio despechado” que comprueba como su pareja se va con otro, o bien como la perfecta excusa para lavar la estrategia de Sánchez.

Por ello el equipo negociador de C´s ya ha trasladado a la dirección del Grupo Parlamentario Popular la posibilidad de tener una reunión bilateral para “explorar últimas posibilidades”. La condición solicitada por Ciudadanos para ese primer encuentro con el PP es que fuera “discreto”. Es decir, que en la medida de lo posible no llegará a oídos de Pedro Sánchez. Algo contradictorio con lo que sí está haciendo Sánchez con Iglesias, reuniones bilaterales, con luz y taquígrafos, con paseos incluidos y con ruedas de prensa posteriores.

De momento, la respuesta que se ha encontrado la formación naranja por parte del PP ha sido positiva. Pero los populares insisten en que esa reunión debe estar precedida de un encuentro entre Mariano Rajoy y Albert Rivera que dé luz verde al resto de los contactos. Una reunión a solas y también discreta en Rajoy y Rivera que se puede producir en los próximos días.

Críticas internas en Ciudadanos

Se ha hablado mucho de las divisiones internas en el PSOE entre Sánchez y Susana Díaz. De las diferencias importantes entre Iglesias y Errejón en Podemos, pero apenas han trascendido las diferencias de criterio que también existen ya en la formación de Albert Rivera.

Algunos miembros de la dirección han expresado que la estrategia del pacto y la adhesión inquebrantable con el PSOE “estuvo muy acertada antes la investidura”. Que la única opción para reflejar una imagen de consenso era la de “negociar con quien había sido designado por el Rey, pero que esa estrategia debería haber girado algo a partir del 4 de marzo”. Que cuando Sánchez fracasó en su segundo intento de investidura y a sabiendas de que el PSOE giraba hacia un diálogo con Podemos, desde Ciudadanos “deberíamos buscar, aunque también sea por interés electoral, un acercamiento al PP”. En eso está ahora Albert Rivera y habrá que estar atentos a las pantallas en los próximos días.