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Kerstin Tristan, la alemana de 56 años que se ha gastado una fortuna en tatuajes
Con miles de seguidores, se ha convertido en un fenómeno en las redes sociales
Le ha costado diez años y más de 30.000 euros, pero esta alemana de Leizpig ha conseguido convertirse en una de las mujeres más tatuadas del mundo. De hecho, si no fuera por la cara, no quedaría ni un centímetro de su piel a la vista.
Según ella misma ha comentado, empezó con lo que ya se ha convertido en un auténtico vicio, en un momento de su vida en la que no se encontraba a gusto dentro de su piel. ¿Solución?: ocultarla bajo un despliegue de flores, figuras geométricas, estampados animales, rostros humanos y mariposas con el que está encantada.
Kerstin que se ha convertido en un auténtico fenómeno con 200.000 seguidores en Instagram, dice que es ahora cuando se ve más joven, con más energía y que al mirarse al espejo siente una sensación de paz que le hace sentirse muy bien.
Lo cierto es que, en su caso, los tatuajes le está dando tan buen resultado personal y económico que ha dejado su trabajo de taxista para convertirse en modelo e influencer.
No obstante, la alemana no puede presumir todavía de ser la mujer más tatuada del mundo. Le supera María José Cristerna, conocida como "la mujer vampiro". Esta mexicana de 46 años, madre y abuela, tiene el 98% de su cuerpo cubierto de tatuajes.
