La celebración de la Infanta Cristina por su divorcio acaba en una Clínica

Se lo estamos contando estos días en ESdiario, hay muchas novedades en la Infanta Cristina. Después de dos años después de su separación, y tras muchas especulaciones acerca de la complicada negociación y de cuándo llegaría su acuerdo de divorcio, la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin han firmado el divorcio. Y lo han hecho, como desvelaba la revista ¡Hola! en exclusiva, en secreto, sin sus hijos, acompañados tan solo por el abogado de la familia y en una notaría de Barcelona.

Pero la noticia del divorcio de los ex duques de Palma, que les contábamos aquí, no es la única que afecta a los Urdangarin y, de paso, a toda la familia del Rey Felipe… porque ahora trasciende que Irene Urdangarin, que ya ha cumplido la mayoría de edad, ha decidido definitivamente emprender una nueva aventura con un sentido solidario. Ha decidido hacer las maletas para trabajar como voluntaria en Camboya, en su deseo de ampliar horizontes en este año sabático que se ha propuesto disfrutar.

Era algo que ya tenía pensado desde hace un tiempo pero la confirmación de sus planes, tal y como ha podido saber ESdiario de fuentes próximas a La Zarzuela, ha supuesto un terrible disgusto a la Reina Sofía, tanto que está desconsolada porque quería evitar que su nieta menor emprendiese esta etapa de su vida que considera “muy arriesgada para una joven de su edad”.

Y la Infanta ha decidido celebrar su nueva condición civil. Según revela Pilar Eyre en su canal en YouTube, lo ha hecho por todo lo alto porque ha pasado por una Clínica prestigiosa para hacerse un retoque estético: "Cristina está pasando una época estupenda. Creo que se ha hecho algún retoquito en la cara porque además yo conozco a la doctora a la que va. Creo que se ha hecho algo porque la veo radiante, muy joven y con una piel muy jugosa".

La Infanta Cristina "se cuida mucho"

Eyre añade además que la hija mediana del Rey Juan Carlos y la Reina Sofía "se cuida mucho, le gusta mucho el deporte y se lleva muy bien con su padre. Cuando hablé con nuestra amiga en común le pregunté si la veía con novio y ella me dijo que sí podría tenerlo o ya lo tenía".

Y son inevitables las comparaciones con su hermana -la Infanta Elena, también divorciada-. La periodista catalana lo tiene claro:

"No son el mismo tipo de divorciadas. Elena no ha conocido varón desde que se separó de Jaime de Marichalar. Ha hecho una vida muy para dentro, muy familiar, muy de sus amigas, de fincas, de cacerías, muy religiosa, muy íntima. Van a llevar una vida muy distinta".