| 26 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Merkel, la mamá de Europa

La cuarta victoria de Mutter Ángela confirma a la mujer más poderosa del mundo como icono de la continuidad en tiempos de convulsiones. Ni la irrupción de la AfD puede borrarle la sonrisa.

| Buendía Opinión

 

 

En la vida hay pocas seguras, más allá de nacer, morir y ver a Merkel gobernando Alemania. Llegó al poder para ser un poco la madre de los alemanes y un poco el padre de los europeos, y ahora está cerca de ser la abuela de ambos.

Siempre gana, la cuestión está en por cuánta diferencia y con quién va a tener que bailar para controlar el Bundestag y Bruselas sin alzar la voz ni meter la pata: aunque la progresía nunca se lo reconocerá, por ser Ángela de un partido conservador, en ella se encarna 'la mirada femenina' como ideal para regir los destinos de la humanidad de otra manera.

La irrupción de AfD, más populista que ultraderechista por mucho que la tentación de resucitar fantasmas nazis sea recurrente en un mundo narrado siempre a golpe de etiquetas, contrapone una dosis de amargura en una victoria que ha confirmado, si hacía falta, la inmensa crisis de la familia socialdemócrata europea, sin partitura con la que tocar en el convulso concierto de la política europea.

 

Merkel, con 20 años, cuando estudiaba Física

 AfD, que toma de los populismos de izquierda su oposición al euro -como Syriza y Podemos- y de los populismos de derecha su repudio al islamismo y a la inmigración -como Le Pen o Trump-, puede facilitar en realidad la gobernación de una Merkel que se ha dado siempre mucha importancia por el curioso método de quitársela toda a sí misma: el casi centenar de escaños del Frente Nacional alemán no computará para nadie a efectos de alianzas y votaciones en el Bundestag, lo que dan más valor a los diputados de la canciller.

 Europa y el mundo viven vientos de cambio, a  menudo transformados en tempestades de incierto destino para un cambio de era cuyo comienzo se percibe pero sin un desenlace previsible.

Y en ese magma de incertidumbres, hay pocos valores seguros. Merkel, la hamburguesa sencilla que Forbes designó hasta en diez ocasiones como mujer más poderosa del mundo, es una de ellas. Mutter Ángela, la madre de todos, seguirá calentando los pucheros de Europa y dando pescozones a quienes no se coman todo lo del plato.