Endesa se frena pero confía en cerrar un buen año

Endesa ha logrado en el arranque del ejercicio un beneficio ordinario neto de 292 millones o lo que es igual, un 52% menos reflejando tanto la tendencia de disminución del Ebitda por los menores precios de la electricidad como el impacto del impuesto extraordinario del 1,2% sobre ventas, al no ser deducible.

El Ceo de la compañía, José Bogas, ha asegurado que estima que para el ejercicio en curso el beneficio cierre entorno a los 1.700 millones de euros.

 Sin embargo, en los tres primeros meses del 24, Endesa ha obtenido un beneficio bruto de explotación de 1.079 millones de euros, un 26% menos que en el mismo periodo de 2023 frente al récord histórico del año pasado.

Además, la empresa energética esta llevando a cabo una política de inversiones más selectiva con 412 millones, lo que equivale a lo realizado un año antes.

La normalización de las condiciones del mercado se ha traducido en una reducción del 53% en el precio promedio de la electricidad en el pool, hasta los 45 euros megawatios hora, incluyendo precios negativos pro primera vez en la historia a partir de abril.

No obstante, los futuros y los modelos de la compañía apuntan a un precio medio de 60 euros/MWh en el medio y largo plazo.

La demanda peninsular del trimestre ha caído el 0,4% aunque ha crecido un 1,2% corregida por laboralidad y temperaturas debido al clima suave, la no recuperación de demanda de sectores como el papelero o el metalúrgico  y las medidas de ahorro y eficiencia.

Bogas ha advertido de que los cuellos de botella en la red eléctrica han impedido conectar en los últimos cuatro años un total de 15 GW de demanda, por lo que pide actualizar la regulación para no dejar escapar oportunidades.

La evolución comercial consolida ,la cartera de clientes en el mercado libre, que se sitúa cerca de los 7 millones otorgando a Endesa una cuota del 29% en una coyuntura muy competitiva.