Un diputado de C´s borra la sonrisa a los independentistas con seis preguntas

En plena polémica por el acercamiento de Pedro Sánchez a Democràcria y Llibertat (la antigua Convergència) y a ERC pese a que el Comité Federal del PSOE le prohibió expresamente contar con su voto o su abstención para ser investido presidente del Gobierno, el Parlament de Cataluña aprobó este jueves una moción con la que el independentismo da un paso más en su órdago al Estado.

Junts pel Sí y la CUP unieron sus 71 votos en torno a un texto en el que reafirman su apoyo a la polémica resolución de desconexión con España aprobada allí mismo el pasado 9 de noviembre y que después fue anulada por el Constitucional. Resolución en la que entre otras cosas proclamaban que el Parlament "no se supeditará a las decisiones del Tribunal Constitucional", sumo intérprete y garante de la Carta Magna. Así como la insumisión al resto de tribunales españoles.

El debate fue de lo más previsible salvo por una cosa: la intervención del portavoz de Ciudadanos, Carlos Carrizosa. El número dos de Inés Arrimadas borró de un plumazo la sonrisa a al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, a su vicepresidente, Oriol Junqueras, y al resto de independentistas lanzándoles una retahíla de preguntas a cual más demoledora.   

"¿Cómo podemos, a partir de ahora, pedir a los ciudadanos que acaten las leyes, que cumplan las normas, que paguen sus impuestos, que conduzcan con prudencia?, ¿Cómo vamos a tener autoridad para hacer cumplir con multas, para sancionar a quien no cumple las leyes, si aquí nuestras instituciones se saltan las sentencias y las leyes?", quiso saber Carrizosa. 

Y continuó: "¿Qué autoridad tiene este Gobierno que ha suscrito una moción con las CUP en la que se pide a los Mossos d’Esquadra que no atiendan los requerimientos de la Audiencia Nacional?, ¿Qué autoridad, quienes están poniendo en riesgo a los funcionarios con sus aventuras secesionistas, quienes están embarcando a funcionarios en sus pulsiones separatistas?, ¿Qué autoridad tienen, después de incumplir ellos las sentencias y las leyes?, ¿Qué autoridad tienen para exigir a nadie que respeten las leyes?".

El diputado de JpS Lluís Llach se llevaba las manos a la cabeza mientras el de Ciudadanos seguía: "Cuando no se acata al Tribunal Constitucional; o cuando, por ejemplo, no se acata una Ley de banderas en los ayuntamientos; o se desacata en un pleno de ayuntamientos, no hablamos solamente de que no se acate a un Constitucional o a una Ley de banderas: estamos hablando del respeto a la democracia".

Hasta que la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, le dijo que se le había acabado su tiempo. Para alivio de los independentistas.