Page prepara una jugarreta para humillar a Cospedal el Día de Castilla-La Mancha

¿Merece este año María Dolores de Cospedal la Medalla de Oro de Castilla-La Mancha, que la Junta ha de conceder en unas semanas y entregar el día 31 de mayo, festividad de la Comunidad? Habrá opiniones para todos los gustos; pero desde luego si Emiliano García-Page no se la otorga, y la decisión le corresponde solamente a él, será un agravio comparativo respecto a los dos presidentes regionales anteriores, puesto que ambos la tienen.

Y en ésas andan los socialistas, en inventarse una buena excusa. Puesto que no están demasiado por la labor de colgar la Medalla de Oro en su edición de 2016 a la única mujer que ha gobernado en Castilla-La Mancha en democracia sin ser del PSOE. Con el agravante de ser del PP. Y de haberles ganado también las últimas elecciones autonómicas, aunque sin mayoría absoluta. 

El 12 de abril el Gobierno regional de García-Page modificó, curiosamente, el decreto de 1992 que regula la concesión de condecoraciones y distinciones de Castilla-La Mancha. Según ellos, por "razones prácticas, organizativas y de mejora". Lo que ha levantado suspicacias.

No obstante los términos de la Medalla de Oro, la que le correspondería a Cospedal, no varían sustancialmente, puesto que sigue siendo una prerrogativa del presidente de la Junta, con un matiz: "Pudiendo ser instada, no obstante, por entidades o instituciones públicas con implantación en Castilla-La Mancha alegando, al efecto, los méritos correspondientes".   

José Bono abandonó la Presidencia de Castilla-La Mancha en abril de 2004 y a su sucesor, José María Barrera, le faltó tiempo para sólo un mes después condecorarle con tan alta distinción. Con toda la pompa además, puesto que en el decreto en el que la Junta lo hacía oficial se leían cosas como éstas sobre Bono:

"Amigo de sus amigos y de sus adversarios, puesto que no se le conocen enemigos"; "luchador por el restablecimiento de la democracia en España"; "Bono, como el caminante de Antonio Machado, hizo camino al andar"; "Bono ha hecho realidad un sueño contando con todos. Con Don Quijote y Sancho. Con el cura y el barbero. con el ventero y el cabrero. Con Dulcinea y la sobrina".  

Cuando Barreda perdió las elecciones el Gobierno de Cospedal no le concedió la Medalla de Oro de Castilla-La Mancha. Pero no por razones de rivalidad política, sino porque ya la tenía desde el año 1991, poco antes de ser designado presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha.

Por ahora, ni oficial ni extraoficialmente a Cospedal se le ha comunicado nada del galardón, según fuentes de su entorno consultadas por ESdiario. No obstante, a los suyos no les extrañaría que García-Page le dejara sin Medalla de Oro, llevando así un paso más allá su enfrentamiento político.

Para mayor agravio comparativo, no es sólo que la tengan los expresidentes Bono y Barreda. También les ha sido concedida en sus distintas ediciones a personajes como Adolfo Suárez -a título póstumo-, Andrés Iniesta, Sara Montiel, los directores Pedro Almodóvar y José Luis Cuerda y hasta al exJemad Félix Sanz Roldán, conquense de nacimiento.