A cubierto: el rodillo de Sánchez y las izquierdas contra el PP empieza fuerte

El Congreso fue escenario este martes del primer gran ensayo general de aquello en lo que Pedro Sánchez quiere convertir la legislatura: en un rodillo que aplaste las grandes reformas impulsadas por el Partido Popular la pasada legislatura. Con la complicidad de los partidos de izquierdas y mientras Ciudadanos trata de buscar su sitio en ese frente anti PP en el que no termina de sentirse cómodo (cómo hacerlo).

El PSOE ha elegido para empezar la LOMCE, la que supuso la séptima ley educativa de la democracia. La consigna: destruir sin pensar siquiera en construir. Basta leer el enunciado de la proposición de ley que llevó el PSOE a debate y votación del Pleno, abogando por "la suspensión del calendario de la implantación de la Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa", la lladada Ley Wert. De la alternativa no dice una palabra.

"Queremos derogar la LOMCE de la reválida y los rezos", sostuvo el portavoz del PSOE, Rafael Simancas. "Queremos un cambio en la ley, en la educación y en el Gobierno", añadió. Aunque allí estaba la popular Sandra Moneo para recordarles a él y al resto de socialistas que en su día la LOMCE respetó el "70%" de las medidas contenidas en el pacto educativo que Ángel Gabilondo, siendo ministro de Educación, intentó sacar adelante sin lograrlo en los últimos tiempos del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

El debate en el hemiciclo sirvió para hacer más que evidente que si Sánchez llega a gobernar se tomará la legislatura contra una revancha contra el PP. Término, el de "revanchismo", que empleó el diputado de Foro Asturias, Isidro Martínez Oblanca. Pero también sirvió para que el líder socialista comprobara sobre el terreno -es un decir porque no llegó hasta la hora de la votación- el tira y afloja al que va a ser sometido desde Podemos y los partidos de izquierdas por un lado; y desde Ciudadanos por el otro.

No en vano la portavoz del partido morado, Ione Belarra, empezó por exigir la "derogación completa, inmediata e inequívoca de la LOMCE". Mientras que la de IU, Sol Sánchez, advirtió a Sánchez: "Lo único que propone es la paralización del calendario. Va a tener que aprender a conjugar el verbo derogar". A ambos partidos les sabe a poco la propuesta del PSOE. Y, en paralelo, el portavoz de Ciudadanos, Antonio Roldán, señaló: "No sirve de nada parar, derogar e ir para atrás (...). La solución no era volver a la LOE (la ley de Zapatero).

En la votación el PSOE obtuvo el apoyo de Podemos y el frente de izquierdas pero sólo la abstención de Ciudadanos. De lo que se valieron los de Pablo Iglesias para recordarle a Sánchez: "Esta postura es más cercana entre Podemos y el PSOE que entre el PSOE y Ciudadanos, esperemos que tomen nota", concluyó Belarra.