Rocío Carrasco sufre un nuevo varapalo que le puede hacer perder mucho dinero

Amén de los quebraderos de cabeza que tiene desde hace años y años con su exfamilia (su exmarido y sus hijos a la cabeza, pero también hermanastros y hermanos de su madre) parece que a Rocío Carrasco se le complican también algunos proyectos laborales.

Y es que la pandemia golpeó duramente su gran proyecto profesional y al que más cariño tiene, el musical en honor a la figura de su madre, Qué no daría yo por ser Rocío Jurado.

Rocío Carrasco y su marido, Fidel Albiac, estrenaron el espectáculo poco antes de que estallara la crisis sanitaria y seis meses después lo planes de gira siguen muy tocados, según recoge la revista Lecturas. 

La propia Rociíto lo comentó en Las Mañanas de TVE y confesó su preocupación por el futuro de la gira del musical y la manera en que está cayendo en picado sin que de momento pueda hacer nada: "Antes de la pandemia teníamos un montón de fechas contratadas. Como cerca de 40 fechas cerradas. Por ejemplo, este fin de semana estamos en Almuñécar (Granada) y la Junta de Andalucía nos ha reducido el aforo a 300 personas. Teníamos el día 7, en Cabra (Córdoba), pero la Junta de Andalucía ha determinado que no se celebre", explicó.

Una situación que les tiene algo descolcados: "Te tienes que ir adaptando porque te encuentras en cada momento con circunstancias distintas".

Amén de su baza profesional, este musical era sobre todo un sueño personal. Y eso aunque estuvo salpicado por la polémica desde el primer momento porque no contó con ningún miembro de su familia (o lo que es lo mismo, de la familia de Rocío Jurado) para ponerlo en marcha.

El caso es que a pesar de haberse implicado en cuerpo y alma los planes no están saliendo como ella esperaba y ante su futuro incierto sigue perdiendo dinero.