Las protestas contra la gestión del Ejecutivo de Pedro Sánchez en la crisis del coronavirus ha vuelto a demostrar este domingo que no se reduce a la de un barrio de ricos de Madrid.
Este domingo, a las 21.00 horas, el estruendo masivo contra el Gobierno de Pedro Sánchez y su gestión de coronavirus ha vuelto a resonar por toda España, dejando claro que no se trata -como han simplificado socialistas y podemitas y sus medios afines- de una revolución de señoritos que viven en barrios de ricos. El malestar ya es transversal y los cayetanos se cuentan por decenas de miles en todo el país.
No han faltado, como era de esperar, las protestas en la madrileña calle de Núñez de Balboa, en el barrio de Salamanca, pero también se han podido ver sonoras protestas contra el Ejecutivo central en distintos puntos de la Comunidad de Madrid -entre ellos la calle Ferraz, junto a la sede del PSOE- y también en otras ciudades de toda España.
Vuelven las protestas a la sede del PSOE: así está a esta hora la madrileña calle de Ferraz, con manifestantes haciendo caceroladas, con banderas de España y pidiendo la "dimisión" de Sánchez https://t.co/bqRcu9hURC pic.twitter.com/7xeKQDeolk
— Europa Press (@europapress) May 17, 2020
#Cacerolada21h
— Plixxken (@Plixxken29) May 17, 2020
Caceroladas en Villaverde Bajo - Madrid pic.twitter.com/kimIGK7qhd
Estas caceroladas comenzaron en este céntrico barrio de Madrid y se han extendido a otras ciudades de Españahttps://t.co/1YKsdA9ocs https://t.co/h2Z83btDrN
— 24h (@24h_tve) May 17, 2020
El descontento general contra el Gobierno es tal que también ha llegado hasta a las puertas de la casa del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, y su pareja, la ministra de Igualdad Irene Montero, en la localidad madrileña de Galapagar.