| 23 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Teresa quiere tener programa propio
Teresa quiere tener programa propio

El pinchazo de María Teresa Campos en GH ha perjudicado a sus hijas

GH quedó tocado de muerte el día en que se anunció que Mercedes Milá no estaría al frente del mismo. Se pensó que María Teresa Campos sería un revulsivo para el debate pero todo lo contrario

| ESchismógrafo Chismógrafo

La visita de María Teresa Campos al debate de Gran Hermano no se limitaba a una sola emisión. El reality busca a la desesperada  caras que puedan remontar la maltrecha audiencia. Se pensó en la veterana periodista dado el interés existente en volverla a ver en un plató tras el ictus sufrido hace unos meses. Se lo propusieron pero ella no estaba muy convencida. En su ánimo no está ser tertuliana, quiere tener programa propio. No obstante, como está ligada a Mediaset por un contrato de cadena, no le quedó más remedio que aceptar. Eso sí, temiéndose lo peor, consiguió que no se la anunciara como colaboradora fija. Fue a  regañadientes y ya avisó que no estaría todo el programa.

 

Paradojas de la vida, el fichaje frustrado de Campos por Gran Hermano ha dejado una damnificada, su hija Carmen, que le ha cogido el gusto a estar en pantalla y estaba detrás de conseguir una silla como colaboradora. Le dieron largas porque su perfil no se ajusta a lo que gusta al público del reality. Eso sí, la puerta no estaba cerrada a visitas puntuales, y más estando los datos de audiencia como están. Sin embargo, tras ver lo sucedido con la veterana comunicadora, no van a apostar por ella. Sin duda, todo un golpe para la Borrego, convencida de que su apellido abre puertas. Y así fue durante muchos años pero todo toca a su fin. Así las cosas, concentra sus esfuerzos en entrar como jurado en un talent show de una cadena autonómica.

 

Gran Hermano 18 está resultando todo un fiasco de audiencia. Tanto los fans del formato como muchos de los ex concursantes están en pie de guerra al ver que el reality ha perdido su esencia para mutar en algo extraño, imposible de definir e identificar. Tampoco la figura de Jorge Javier Vázquez ha tenido una buena acogida. No fue conciliador con los críticos en su primera aparición y eso le ha pasado factura. En vez de escuchar, se subió a las alturas. El ego le ganó la partida. Las críticas también arrecian con fuerza sobre su persona. Sin embargo, sigue haciendo oídos sordos.

 

Los entendidos en GH aseguran que el concurso quedó tocado de muerte el día en que se anunció que Mercedes MIlá no estaría al frente. Tras esto, ya daba igual quien la sustituyera, pues fans y ex concursantes, en su mayoría, consideran que es irremplazable. Desde Sant Just, donde está instalada, la periodista contempla con tristeza lo que está ocurriendo. Es lo único que expresa. Ha sido invitada a la cena que los ex concursantes celebran anualmente, y que en esta ocasión está señalada para el 26 del corriente mes, pero no parece probable su asistencia.