Buenafuente, del éxito viral al fracaso de audiencia más sonado de la televisión

La gran apuesta televisiva de esta temporada es sin duda la que ha hecho #0 con el programa del humorista, presentador y productor Andreu Buenafuente la noche de los lunes a jueves en el prime time del canal de pago Movistar, su Late Motiv.  Los calamitosos datos de audiencia contrastan con el éxito viral que en la red tienen algunos de los contenidos de su programa. Pero son mero espejismo que no se refleja en telespectadores reales.

El espacio de Buenafuente en el canal de pago responde sin duda a su “ADN” personal, pero en esta ocasión con algunas singularidades que hacen aún más llamativos sus continuados fracasos de audiencia. El programa no engancha. En ESdiario les contamos  primero sus registros para posteriormente entrar a detallar las particularidades de un programa en el que los directivos de la cadena habían depositado todas sus esperanzas, diluidas con unos datos que sólo invitan al desaliento. 

Así, Late Motiv de Andreu Buenafuente representa un caso extraordinariamente anómalo en el panorama televisivo. Con un presupuesto de más de 60.000 euros por programa, el presentador catalán logra una audiencias que están alrededor de 0.3% de cuota de pantalla, lo que le representa en torno a 25.000 espectadores por noche. Unas cifras irrelevantes (ha habido programas en lo que no ha superado el testimonial 0,1% de share) y eso que su franja de emisión es la más óptima, entre las 23 y las 0 horas. En círculos televisivos del propio canal se bromea con estos datos y se dice que “los espectadores de Buenafuente caben en la plaza de toros de Las Ventas”.

Pero es que además la apuesta de la cadena es incontestable. #0 no ha reparado en gastos con Buenafuente. El programa es notablemente más ambicioso que cuando se emitía en La Sexta. Andreu Buenafuente ha recuperado la banda de música en directo y ha dejado a un lado su habitual apuesta por la “cantera” de cómicos y su apuesta por gente con talento pero desconocidas para el gran público y ha tirado de “billetera” para realizar sonados fichajes de colaboradores estrella, como es el caso del imitador de moda, Raúl Pérez.

Polémica como recurso

Pese a ello la fórmula sigue sin funcionar y el hecho de no remontar la audiencia ha provocado alguna polémica muy comentada en los medios de comunicación. La más reciente se produjo hace tan solo unos días Buenafuente daba una importante reprimenda a un entrevistado en directo. Días después desvelaron que se trataba de una broma. Una discutible manera de intentar tener relevancia.

Sonada fue también la polémica imitación del humorista Javier Quero del programa de Bertín Osborne. En la imitación, el popular cantante invitaba a Hitler a su casa. El lío fue mayúsculo y el cruce de dardos muy sonado en el panorama mediático. Sin embargo la polémica se antojaba “artifical” porque sólo dos semanas después Bertin Osborne invitaba a Mi casa es la tuya en Telecinco.