| 16 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Todos los líderes de los partidos nacionales en el debate electoral, entonces sin Arrimadas
Todos los líderes de los partidos nacionales en el debate electoral, entonces sin Arrimadas

El centroderecha unido saca más de 7 puntos a la suma de PSOE y Podemos

Sánchez fue el presidente menos votado de la historia y, paradójicamente, gobierna y puede eternizarse por una combinación de dos factores que PP, Cs y VOX no saben compensar.

| ESdiario España

En votos totales, el centroderecha casi arrasa a la izquierda en España, con siete puntos de ventaja. No es una novedad: el propio CIS le daba ya cinco por encima en mayo de 2018, cuando Pedro Sánchez decidió poner una moción de censura tras dos derrotas en las Elecciones Generales celebradas en menos de seis meses.

El penúltimo ejemplo es una encuesta de NC Report para La Razón da pues, una foto final muy estable en los últimos años. Pero a la vez, muy antagónica a lo que acaba ocurriendo con el recuento de votos y el reparto de escaños. La explicación es bien sencilla: la izquierda amortiza mejor las papeletas recibidas y, además, suma en sus alianzas a partidos que jamás contaban para ningún intento de formar Gobierno, como Bildu y ERC.

Y el centroderecha, en cambio, tira a la papelera muchos de sus votos por la fragmentación en tres formaciones distintas y el peculiar efecto de la Ley D'Hont: los restos electorales, esos votos decisivos para adjudicar terceros, cuartos o quintos escaños en muchas provincias, benefician siempre al partido más votado.

El citado sondeo permite llegar a esa conclusión, que reconocen a ESdiario fuentes políticas del PP: los populares sumarían, con VOX y Ciudadanos, el 45.5%. Por contra, PSOE y Podemos se quedarían en un 38.4%.

 

Traducido de manera directa ese escrutinio a actas de diputados, sin la corrección territorial de la Ley electoral, el centroderecha lograría una holgada mayoría absoluta y Sánchez e Iglesias tendrían imposible gobernar.

"España no es de izquierdas ni independentista, pero eso es lo que la gobierna", resume desolado un dirigente popular, poniendo el dedo en la llaga de la "tormenta perfecta" que beneficia a Sánchez: él gana por lo que pierde la división en tres del centroderecha y por tener socios potenciales que completan los votos propios.

De hasta qué punto el Gobierno actual depende del separatismo, da cuenta de que la única manera de superar en porcentaje de votos a los otros tres partidos nacionales es sumando a ERC, Bildu, el PNV e incluso Junts pel Cat, que tienen y tendrán la sartén por el mango ahora y siempre mientras el PSOE acepte su tutela y sus rivales no encuentren una fórmula para aprovechar mejor los votos que reciben.

A este respecto, el entendimiento entre PP y Ciudadanos parece más sencillo que el de cualquiera de los dos con VOX, alejado del foco de una alianza. Fuentes de Génova confirman a este periódico el deseo de "cuidar" la relación con Inés Arrimadas, cuya relación personal con Pablo Casado es óptima, y su disposición a lanzar incluso candidaturas conjuntas en dos de las cuatro provincias catalanas para esas Elecciones Catalanas.

La clave de CS

"Y nunca descartaremos un proyecto como España Suma", añaden, sin demasiada confianza en que algún día sea posible. Por su parte, desde el cuartel naranja se "garantiza" la buena relación con los populares, y se cita expresamente el caso de Madrid:

"Hemos aprobado la investidura de dos presidentas, Cristina Cifuentes e Isabel Díaz Ayuso, y todos los presupuestos de estos años. Dudar de nosotros o querer provocar Elecciones es injusto y un error".

Lo cierto es que la izquierda, pese a las urnas, se ha instalado en un espacio de confort en el que incluso importa el número de escaños propios del PSOE o de Podemos. Y liberales y conservadores, por contra, no encuentran solución sencilla al drama que padecen: tienen más apoyos totales de los que lograr en la distribución de escaños. Y la moción de censura, lejos de acercar una solución, la hace aún más remota: VOX está centrado en quitar votos al PP como sea. El sueño del sorpaso es su gran objetivo.