| 27 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Pedro Sánchez y Pablo iglesias
Pedro Sánchez y Pablo iglesias

La ciudad no es para mí. Una idiotez

¿Quién es más idiota? ¿el “tomado por” o el que “toma por” al otro? La impotencia ante la inoperancia ajena es también una idiotez.

| José Mª Felix Edición Valencia

Iba a titular mi colaboración de hoy -yo sí soy partidario del colaboracionismo crítico- con el título más dramático de “impotencia”, y andar fantaseando sobre la oportunidad de un viagra multisex que mantenga despierto el apetito político, cuando me ha salido un espontáneo -ahora que los mozos se sientan en San Fermín en protesta por el entrenamiento bovino- con la idiotez de la semana.

Ya he dicho alguna vez que los españoles le vamos cogiendo el tranquillo a esto y baja la prima (de riesgo) y sube la previsión de crecimiento económico. Mientras, España se desertiza.

Pero no sólo en lo geotécnico, que en lo social también. Ahí están las cifras de abandono rural que resultan dramáticas, más si se comparan con las de natalidad.

Es el retrato real, la cartografía de veras ahora que se hacen cartografías de cualquier cosa. La otra, la puramente virtual, viene a ser un conjunto de capas o curvas de nivel de idiocia. La desertificación intelectual.

Es difícil acotar el nivel específico que le corresponde a Iglesias, al usar él mismo el calificativo (para referirse a Sánchez, claro está) y hubiera resultado más pedagógico el modo “nos toma por idiotas”. Paradigma -ahora sí procede el tan manido término- habitualmente utilizado para devolver el insulto con ironía.

Porque la pregunta es ¿quién es más idiota? ¿el “tomado por” o el que “toma por” al otro?

La impotencia ante la inoperancia ajena es también una idiotez. Y en cuanto me lo aclaró el conductor podemita, cambié de tema de inmediato. Casi me engancho al culebrón de los viernes de Celaa, entreverada de señorita Rottenmeier y la madre del vasco de 'Arriba y Abajo', regañando al personal.

Esa vergüenza nacional que es el separatismo consentido (alentado en ocasiones) no deja de salpicar la escena, como lo hace una nube de granizo tras sequía prolongada. Nueva condicional de Pujol hijo y nueva imputación a Torra para su martirologio programado. Otro santo más, como Junqueras, aunque anden a la greña.

Woody Allen nos cae mejor pero ya está condenado de antemano, como le pasa a Paco Camps, por mucho que la justicia le absuelva. ¿Impotencia o idiotez?. Evidencias, en todo caso, de una persecución política en toda regla.

Bonus a la griega para el ganador o la lista más votada … más imaginación señores, que parecen esos memes antiguos que, de repente, te vuelve a enviar la peña. Extemporáneos y a la postre inciertos, tal vez un indicio más de la licuefacción del tiempo moderno. Y del abandono de lo sólido.

Se pincha, por aquí y por allá, el globo demasiado hinchado de altos cargos del Consell. Es lo que tiene insuflar más gas de la cuenta. Lo malo es si se pierde el control del hilo que lo sujeta. Entonces vuela sin rumbo. ¿Idiotez o impotencia?

Con o sin Noruega, la solución de Venezuela sólo pasa por la salida de Maduro del poder. Impotencia e idiotez.