La pinza PP-Ciudadanos-Podemos pincha los sueldos del Consell

La iniciativa ha sido de Ciudadanos y consiste en una enmienda a los presupuestos de la Generalitat para 2018. El marco ha sido la comisión correspondiente de Les Corts (Economía, Presupuestos y Hacienda) que estudia las posibles modificaciones al proyecto de ley.

Pero lo llamativo es que el “tercer socio” del Botànic se haya sumado al centro-derecha con parecidos argumentos a los del PP: no son admisibles las subidas de sueldo a políticos mientras haya gente que lo pase mal. Eso sí cada uno pone su propio ejemplo: listas de espera crecientes en el caso del PP, dependientes por evaluar en el de Cs, y familias en situación de “asfixia” por la crisis en el de Podemos. Además Ciudadanos ve incompatible haber aprobado hace nada la Renta Valenciana de Inclusión y promover ahora estas subidas.

La enmienda naranja (el PP había presentado otra parecida, pero que la formación morada la aceptara ya hubiera sido la bomba) rechaza la percepción del complemento de carrera administrativa para los funcionarios que ocupen altos cargos y que estos no puedan cobrar en dichos puestos menos de lo que ingresaban antes de acceder al puesto político. A eso hay que añadir la modificación de la Ley de Incompatibilidades vía enmienda a la ley de acompañamiento de los presupuestos que en la práctica va a imposibilitar a los altos cargos ejercer la docencia. En este caso la iniciativa fue del PP (respaldada por Cs y no adscritos), y sólo la abstención de Podemos la posibilitó.

Nos hallamos pues ante tres maneras distintas de limitar las percepciones de los altos cargos del Consell que no hubieran salido adelante sin permiso del partido de los círculos. Y claro, ni PSPV ni Compromís están contentos. Los socialistas alegan que hay 4.000 funcionarios que cobran más que Ximo Puig y que “dedicarse a la política no puede suponer un perjuicio para estas personas”, según José Muñoz.

Mireia Mollà, Compromís, ha insistido en que “no se entiende que un presidente cobre menos que el organigrama que le precede” y que “daba por hecho que había debates que estaban superados”. Pues parece que no era así.

Aun con este debate crematístico abierto, y con el anexo de qué personas con éxito profesional van a querer dedicarse a la política perdiendo dinero, no debemos olvidar que los sueldos en la Generalitat son inferiores a los del Ayuntamiento de Valencia. Pero de eso no habla nadie.