Entre los aficionados del Chelsea, gran parte de la prensa inglesa y muchos analistas españoles la conclusión es clara. El entrenador del City se está acostumbrando a ofrecer su peor cara.
Fue un gesto feo, maleducado y sostenido de Pep Guardiola. El entrenador del Manchester City está recibiendo un aluvión de críticas desde distintos sectores tras negarse este domingo a estrechar la mano de dos internacionales españoles, Cesc Fábregas y Cesar Azpilicueta, enrolados en las filas del Chelsea.
Y es que el de este fin de semana fue un partido agrio, muy caliente y con entradas escalofriantes, que provocaron una monumental tangana entre futbolistas de ambos equipos.
Fue cuando el Kun Agüero hizo una entrada brutal al brasileño David Luiz, un entradón que le costó la expulsión. Luego la escena se repitió cuando Fernandinho vio la roja tras agarrar por el cuello a Fábregas.
Pero al bochorno del encuentro también se quiso sumar Guardiola cuando el árbitro dio el pitido final. Y, ostensiblemente, negó el saludo a Cesc como se encargó de recoger en su propia cuenta oficial de Twitter el club de Londres.
Pep Guardiola completely ignored César Azpilicueta & Cesc Fàbregas who had approached him to shake hands after the match. Classy. #MCFC #CFC pic.twitter.com/B1fv8MOvkU
— Chelsea GIFs (@ChelseaGIFs) 3 de diciembre de 2016
El del Chelsea extendió la mano para saludar a Guardiola, quien pasó a su lado sin inmutarse y sin saludar a Cesc, que se, quedó con la mano tendida en el aire. Azpilicueta, que estaba al lado, también le tendió la mano y se quedó sin respuesta.