| 23 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Javier Maroto con varios candidatos del PP a las autonómicas, entre ellos los de Murcia, La Rioja y Castilla y León.
Javier Maroto con varios candidatos del PP a las autonómicas, entre ellos los de Murcia, La Rioja y Castilla y León.

Mazazo en el PP: asumen que Cs pactará con el PSOE en CyL, La Rioja y Murcia

El último movimiento de Rivera, distinguiendo entre sanchismo y PSOE, ha convencido a los populares de que si a Ciudadanos le dan los números no dudará en arrebatarles los tres feudos.

| Ana Isabel Martín España

Albert Rivera ha llevado la intranquilidad a la sede del PP a cien días de la triple cita electoral de mayo. O mejor dicho: la ha aumentado. Especialmente en Castilla y León, La Rioja y la Región de Murcia, tres feudos que el PP lleva gobernando 32, 24 y 24 años, respectivamente. 

El último movimiento estratégico del líder de Ciudadanos, distinguiendo entre el sanchismo y el PSOE de cara a futuros pactos postelectorales, ha encendido las alarmas en Génova 13. 

La dirección nacional del PP analizó este martes las palabras que un día antes había pronunciado Rivera, cuando insinuó que con Sánchez no pactaría pero con ciertos barones socialistas, sí. 

 

Pero al PP nunca se le ha dado bien interpretar las palabras de Rivera, así que su vicesecretaria de Comunicación, Marta González, pidió directamente al presidente de Cs que les aclare qué quiso decir. "Parece que pretende hacer una diferencia entre el PSOE y Sánchez (...). Nos gustaría una mayor aclaración", sostuvo. 

En realidad, en las últimas horas los populares no han hecho sino constatar algo que ya venían rumiando: si a Ciudadanos le salen las sumas con el PSOE en Castilla y León, La Rioja y Murcia, no serían nada descartables los pactos para desalojar del poder al PP

El presidente de Murcia y candidato, Fernando López Miras.

 

Desde Cs aseguran que ahora no toca hablar de escenarios postelectorales, pero sí dejan clara una cosa: en estas elecciones su criterio no será el de respetar la lista más votada como antaño, sino que van a priorizar lo que llaman "proyectos de regeneración". 

Ése fue el argumento esgrimido en Andalucía para mandar a Susana Díaz a la oposición después de haber sostenido el gobierno del PSOE la anterior legislatura, y el patrón que Cs insinúa que podría repetir en otras comunidades donde hoy en día apoya al PP por ser la lista más votada. 

De hecho cuando el PP y Cs sellaron su acuerdo en Andalucía, los populares se apresuraron a proclamar el inicio de una bonita amistad entre ambos partidos que tendría continuidad en otros territorios. La reacción de los naranjas, por contra, fue frenar en seco a los de Casado y aclarar que ellos pactarían a izquierda o derecha según el lugar y los resultados electorales. 

En Castilla y León, La Rioja y Murcia hacen números

En los tres feudos mencionados son conscientes de que pende sobre ellos la espada de Damocles de Cs; o su purgandus populus, como ironiza uno de los barones regionales señalados. Pero en los tres confían en que en ningún caso se produzca ese escenario, porque hay que tener en cuenta otro factor: ¿Y si un pacto en cualquiera de las tres pasa por una abstención de Podemos, enemigo declarado de Cs?

En Castilla y León, según fuentes del partido consultadas por ESdiario, sitúan su suelo electoral en 32 escaños de los 43 en que está fijada la mayoría absoluta. En La Rioja, el PP cuenta con sacar como mínimo 12 de los 33 de la Cámara regional (la mayoría absoluta está en 17). Y en Murcia la mayoría absoluta está en 23, y los populares confían en no bajar de los 16.

Hasta que las urnas no hablen, todo son cábalas y más cábalas.