| 20 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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La agenda de vértigo del PSOE: de la causa justa al argumentario semanal

Compromís y Unidas Podemos tratan de aguantar el ritmo trepidante de los temas que saca al PSOE a la palestra para que acaparen la actualidad, mientras que Vox supera las respuestas del PP

| Héctor González Edición Valencia

"Ahora vamos a ser dueños de nuestro destino", escuchaba en una televisión nacional que respondía un inglés al preguntarle si estaba contento por el brexit y cuya respuesta, evidentemente, era afirmativa. Ese mensaje, repetido hasta la saciedad por algunos dirigentes británicos desde hace años y asumido por la población como propio, constituye una muestra más de cómo una idea simple y emocional cala en el electorado.

¡Qué sentimiento más bonito el de pretender que con tu voto estás liberando a tu país de un injusto dominio! O que estás salvándolo de una involución, una destrucción climática o cualquier pesadilla de dimensiones gigantescas que exista o quiera proponer el gobernante de turno. La figura romántica de superhéroe, o simplemente héroe o valiente, que con su voto pueda evitar una injusticia, moviliza.

Ir al colegio electoral y depositar un voto no cuesta dinero y supone un esfuerzo escaso comparado con el beneficio emocional que implica considerarse un rebelde con causa

Ir al colegio electoral y depositar un voto no cuesta dinero y supone un esfuerzo escaso comparado con el beneficio emocional que implica considerarse un rebelde con causa, un justiciero o un luchador que para los pies al enemigo. Porque moviliza más votar contra alguien que votar simplemente por alguien. Así crecieron Podemos (contra la casta) y Cuidadanos (contra la vieja política) y luego Vox y PSOE. Y se ha hundido el PP porque se ha perdido en la agenda de la vorágine de temas contra los que combatir que propone el Partido Socialista (siempre todos salpimentados de la coletilla ´progresista´, palabra nutritiva para el ego de quien la asume).

La agenda de temas injustos contra los que luchar cambia casi semana a semana. LGTBI o feminismo ya han sido superados como conceptos genéricos. El cambio climático (el término ecologismo ya se queda corto) es de bandera colectiva, todos estiran a ver quién se queda con el trozo más grande, que empiezan a perder ya Unidas Podemos y Compromís frente a un PSOE -a nivel estatal- que todo lo acapara informativamente.

La consellera Bravo y Salmerón recogen la bandera

Ocurre como con la Igualdad, que también necesita ir un poco más allá. Como hizo la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, avanzando por encima de sus competencias, rebuscando en el argumentario del PSOE y proponiendo una asignatura de Igualdad en los colegios.

Como Ciudadanos, por medio de su activo diputado Jesús Salmerón, que ha propuesto en Les Corts que también se imparta en las residencias de mayores para evitar discriminación a miembros del colectivo LGTBI (nuevo término que ha dejado en obsoleto el de gays y lesbianas).

Bravo, que ha dado el salto de la independencia judicial a abanderada de la agenda socialista, también ha aludido a la prostitución. Nueva línea roja o titular de la actualidad. Es un paso más allá del feminismo y de la igualdad. Un problema que para nada es nuevo y que, a tenor de las continuas informaciones y repeticiones de la palabra por parte de líderes del PSOE, parece que se acabe de descubrir.

Y mientras, el desempleo crece en la Comunidad Valenciana, la economía se estanca, el precio de la vivienda se sigue incrementando, la crispación aumenta, Cataluña aprieta a medida que se sume en su proceso electoral, los agricultores se empobrecen y reivindican, los delitos violentos aumentan...y el ciudadano medio, afectado por todos esos problemas, sufre el bombardeo de otros que, a priori, no formaban parte de su agenda.

Mensajes sutiles

Pero, a base de que se los repitan, tiende a asumirlos como propios y, sin demasiado esfuerzo, a repetir argumentario de partido y hacerlo pensando que es el suyo, que la idea sale de su propia mente. Porque la inteligencia y sutileza (y la potencia con que se emite por múltiples medios y soportes) de la transmisión hace que no se imponga ese argumentario, que simplemente se conciencie de su importancia. Y el ciudadano actúa en conciencia. 

Y en esta batalla por marcar la agenda y decidir qué temas suscitan el debate popular, el PP se muestra totalmente perdido. Cada nueva cuestión que surge parece dar en su línea de flotación y no reacciona con firmeza o convicción. Recurre a respuestas manidas y cansinas no adaptadas al nuevo escenario. Mientras su secretario general, Teodoro García Egea siga con la batuta, me temo  que, a tenor de sus ´éxitos´cosechados hasta ahora, no acelerará.

Vox, por su contundencia que hace que muchas veces se pase de frenada -como con la votación en el Ayuntamiento de Valencia contra la condena a los asesinatos en campos de exterminio nazis- mantiene mejor el citado ritmo aunque solamente sea para destacar como antagonista del gran protagonista, el PSOE, que es lo que a este último le interesa para hundir al PP.

Unidas Podemos y Compromís tratan de seguir el paso vertiginoso que marca el PSOE y buscar arañar liderazgo en cuestiones como medio ambiente

Ciudadanos anda más preocupado por la elección de su ejecutiva y por su asamblea. Y Unidas Podemos y Compromís tratan de seguir el paso vertiginoso que marca el PSOE y buscar arañar liderazgo en cuestiones como medio ambiente con la aparición por sorpresa de Pablo Iglesias en Denia, en una visita relámpago para proponer pocas soluciones y atizar al PP, por la "globalización". Y Compromís sigue con el valenciano como bandera. Cuatro años después ya se ha quedado bastante desfasado. Y a la espera de la financiación justa, también un reclamo electoral que ni emociona ni moviliza.

Lo único que pueden esperar todos los rivales del PSOE a corto plazo consiste en que este partido acabe desfondado por su ritmo vertiginoso de marcar agenda y, por su precipitación, se hunda en errores propios como la reunión venezolana de Ábalos o el laberinto catalán.

O por no saber encarar las protestas de los agricultores (eso no formaba parte de la agenda socialista), un colectivo batallador como pocos (quizás como los mineros) que sabe movilizarse con fuerza. De lo contrario, las perspectivas electorales socialistas seguirán en ascenso dentro de esta campaña electoral continua. Y no únicamente porque controle el CIS Tezanos.