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El alcalde más mítico del PSOE irrumpe de nuevo para aguarle la fiesta a Sánchez
Francisco Vázquez, junto a su gran amigo Alfonso Guerra, se ha convertido en el único "pepito grillo" del PSOE. Y ni la ola a favor de su nuevo líder le amordaza.
Ni siquiera la doble euforia que atraviesa al PSOE de norte a sur acalla al exalcalde de La Coruña, Francisco Vázquez, un referente del socialismo de siempre, convertido junto a Alfonso Guerra, en la voz crítica de un partido radicalmente distinto al que lidera ahora Pedro Sánchez.
Vázquez ha vuelto a irrumpir, en plena resaca postelectoral, para aguarle la fiesta al presidente en funciones. Con un artículo en el que, además, se vincula con el propio Guerra, otro de los enemigos íntimos del actual inquilino de La Moncloa.
En un artículo en el diario El Mundo, el exalcalde y embajador en la Santa Sede, no se muestra optimista por la victoria de Sánchez ni mucho menos y arremete contra sus elegidos para presidir Congreso y Senado, y vaticina lo que puede avecinarse en Navarra y en Baleares.
A Meritxel Batet y Manuel Cruz los llama Vázquez "voceros significados de la implantación en el hablar común de la terminología que contrapone como si de dos realidades opuestas se tratara, a Cataluña y a España", y, añade, "en el mal intencionado intento de suprimir la fórmula que corresponde, que no es otra que la de Cataluña y el resto de España".
Y advierte el veterano socialista: "Ahora todo dependerá del devenir que tomen los dos principales problemas que hoy tiene España: las alianzas que se establezcan en Navarra, comunidad lastrada políticamente por la disposición transitoria cuarta de la Constitución, norma que puede legitimar las demandas de referéndum en otros territorios; y la presumiblemente peligrosa evolución de la gran traición del pancatalanismo implantado en Baleares por el Gobierno del partido de Sánchez".
