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La asignatura pendiente de una comensal de First Dates le juega una mala pasada
En el restaurante del amor de Cuatro puede pasar absolutamente de todo. Desde parejas que encajan desde el minuto uno, hasta otras cuyas citas son un auténtico desastre.
Lucía se presentó en First Dates como una joven "inquieta y despierta" que buscaba encontrar a un chico que fuera "leal y fiel". Y es que según esta candidata a encontrar el amor, las redes sociales han hecho mucho daño. "Nuestros padres están juntos gracias a que no existían las redes sociales", aseguró.
En cuanto a David, su cita, se describió como alguien "consciente y pertinente" y Lucía pareció gustarle. "Me parece una chica muy simpática, muy risueña, en todo momento está sonriendo y yo me siento súper a gusto con ella y yo noto que está a gusto conmigo", comentó. No obstante, la joven quiso saber cómo era él en pareja.
"Me considero muy sensible, lloro por todo, soy muy miedoso", confesó David. Sin embargo, este aspecto no terminó de convencer a Lucía. "A mí me gustan mucho los tíos duros, siempre fui de malotes", aseguró. Pero las confesiones no terminaron ahí. Él quiso saber cómo era ella a nivel sexual. "Obviamente es importante, porque es otra parte de la relación. Para mí es un 70-20", dijo Lucía. "¿Y el otro 10?", le preguntó David.
"70-30. Madre mía, las matemáticas", rectificó ella al ver que había tenido un lapsus. Un divertido fallo con una asignatura pendiente que no pasó desapercibido para su cita. A pesar de que la cena no fue mal, ella no sintió "química" con él, por lo que no quiso que se produjera un segundo encuentro entre ellos.
