| 18 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Cisma en el PSOE: los barones plantan a Sánchez asqueados por su pacto con ERC

Siete de los ocho presidentes regionales del partido han faltado al discurso de investidura de su jefe, evidenciando así la fuerte marejada interna por el acuerdo con el independentismo.

| A.I.M. España

Aunque Pedro Sánchez conseguirá el martes ser investido presidente del Gobierno en segunda votación, el desgarro en las filas socialistas por el acuerdo con Esquerra (cuya letra pequeña es una incógnita) es evidente. 

Lo demuestra la estampa que se ha producido este sábado en la tribuna de autoridades del Congreso, otras veces atestada. Los presidentes regionales del PSOE han dado un sonorísimo plantón a su líder durante su discurso de investidura.

Solo la riojana Concha Andreu ha estado presente en el día grande de Sánchez (de hecho se ha encargado de hacerse notar publicando varios tuits). Los otros siete presidentes de comunidades gobernadas por el PSOE han faltado, según han confirmado fuentes de la Cámara a ESdiario, pese a que lo habitual es que el discurso de investidura de un candidato concite a la mayoría de los presidentes regionales de su partido. 

Han fallado  el castellano-manchego Emiliano García-Page, el extremeño Guillermo Fernández Vara, el aragonés Javier Lambán y el asturiano Adrián Barbón. Ni siquiera han estado el valenciano Ximo Puig, la navarra María Chivite y la balear Francina Armengol, estos tres últimos más de la cuerda de Sánchez, puesto que en sus respectivas comunidades gobiernan con partidos de corte nacionalista. 

“No se puede hacer consultas de territorios por separado, salvo las preceptivas reformas de estatutos de autonomía previa votación de las Cortes”, le recordó el viernes García-Page. El cisma no se puede disimular.

En ausencia de las principales voces de los barones, ha asumido la tarea de defender el acuerdo con ERC Susana Díaz, hasta no hace mucho la más crítica con el independentismo. 

Ahora que Díaz no es presidenta de Andalucía y que ha caído en desgracia tras la condena de los EREs, está intentando hacer méritos ante Sánchez para que le deje seguir al frente del PSOE andaluz. Por eso este sábado estaba la primera en el Congreso. Y casi la única.