| 18 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Cristiano Ronaldo intentó justificar sus declaraciones pero el seno del madridismo echaba humo.
Cristiano Ronaldo intentó justificar sus declaraciones pero el seno del madridismo echaba humo.

La jugada de los whatsapp le sale redonda al "incontinente" Cristiano Ronaldo

Las declaraciones del jugador tras la derrota en el derbi madrileño encendieron al vestuario que vivió momentos de máxima tensión. Las aguas volvieron a su cauce gracias a una estrategia.

| ESdiario Deportes

La jugada le salió bien al astro portugués que este lunes entró en Valdebebas sin saber qué panorama se encontraría en el entrenamiento tras la crítica directa a la forma física de sus compañeros. A la plantilla del Real Madrid no le sentó bien la "rajada" de Cristiano Ronaldo tras la derrota en el derbi madrileño (0-1) y a pesar del intento que hizo matizando después sus palabras en Radio Marca, tuvo que justificar ante sus más allegados en el club el trasfondo de su mensaje.

Cristiano recurrió a la aplicación de Whatsapp para ponerse en contacto con ellos la misma noche del sábado y conversó con algunos para serenar los ánimos tras el consejo del capitán Sergio Ramos. En su intento de solucionar ante la prensa el lío en el que se había metido, echó más leña al fuego afirmando "cuando digo eso me refiero al nivel físico, no de juego. Yo no soy mejor que ninguno de mis compañeros". Lejos de pedir perdón o de confirmar que sus palabras se habían malinterpretado, el delantero blanco dejó caer que se siente en un nivel superior al del resto de la plantilla aunque sea solo por "físico".

60 segundos necesitó Cristiano para dar la cara ante sus compañeros

Lo sorprendente es que ningún futbolista le pidió explicaciones en el entrenamiento organizado por Zidane este lunes. Un minuto fue el tiempo que se tomó el portugués para aclarar de viva voz a la plantilla que sus palabras no querían menospreciar a ninguno de ellos. La "estrategia del Whatsapp" le funcionó porque la tensión fue extrema en el vestuario tras el 0-1 contra el Atlético de Madrid el pasado sábado y se esperaban represalias. 

Quizás tuvo algo que ver la reunión improvisada que celebraron un día después del encuentro algunos pesos pesados del vestuario en la ciudad deportiva. A pesar de que Zidane había dado el día libre a todos, hasta 12 jugadores se presentaron en las instalaciones para un entrenamiento optativo que decidieron aprovechar. Pepe, Marcelo, Arbeloa, Bale, Modric, Lucas Vázquez, Nacho, Benzema, Casemiro y Varane se vieron las caras en el césped y tuvieron tiempo de comentar lo ocurrido aunque algunos afirmaron no saber nada de lo ocurrido, según comentó Manolo Lama en los micrófonos de la COPE. 

Pocos se creen que los jugadores se mantuvieran al margen tras el incendio que desató Cristiano en el Bernabéu pero aún así hay otro problema que les preocupa más: la lista de bajas que prepara el técnico francés. La dirección reafirmó su compromiso con Zinedine Zidane el pasado sábado y se avecinan cambios en el club merengue. Una salida de tono puede señalarles como los siguientes candidatos a abandonar la entidad y eso no interesa.