Los policías se hartan y desvelan cómo Ahora Madrid boicotea su trabajo

A la Policía Municipal de Madrid se le ha agotado la paciencia con los responsables del Ayuntamiento de Madrid. No es la primera vez que su trabajo es atacado desde la propia corporación de Ahora Madrid, pero la campaña de intoxicación tras la muerte del inmigrante Mmame Mbayé en Lavapiés ha sido la gota que ha colmado el vaso. Tanto, que se han visto obligados a exigir este jueves la dimisión inmediata del concejal de Seguridad, Javier Barbero.

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Un grupo de agentes se ha concentrado ante el Palacio de Cibeles, mientras se celebra el Pleno de la capital, para protestar por el "trato recibido" tras los incidentes del pasado jueves en Lavapiés, pedir "respeto" para su labor y la dimisión del delegado de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, por "echar más leña al fuego".

Así lo ha explicado ante los medios de comunicación el portavoz del Colectivo Profesional de Policía Municipal (CPPM), Alberto Cid, quien ha asegurado que el Consistorio "no valora" su labor y en ocasiones "la dificulta".

"Mintieron (los ediles de Ahora Madrid) en redes sociales agravando esta situación; el delegado sabía que era mentira y siguió dejando que esa información corriera por ahí", ha cargado.

Representantes sindicales de la Policía Municipal, este jueves, junto al portavoz municipal del PP, José Luis Martínez Almeida, y a la de Cs, Begoña Villacís.

Cid ha criticado que pese a que el equipo de Gobierno sabía que la Policía "no tenía nada que ver" en la muerte del ciudadano senegalés Mmame Mbayé, dejó "correr ese bulo". "Pedimos que dimita porque no ayuda ni a los vecinos ni a los propios trabajadores del Ayuntamiento, y empeoran el servicio de este barrio", ha expresado.

Los policías han indicado que lo que más les dolió fueron "algunos tuits" en los que "se dio a entender que la muerte del inmigrante senegalés fue por una reacción xenófoba de la Policía".

Además, Alberto Cid ha revelado que "parece ser que hay una orden no escrita de ir por Lavapiés lo menos posible". "Lo han dicho verbal y no está escrito. Lo primero es nuestra seguridad", ha advertido.