Las ideas no son ilegales, los delitos sí

El pasado día 16 de Octubre, la magistrado juez del Juzgado Central nº 3, en su resolución, entre otras cosas argumentaba esto:

"Además, cobra especial importancia el papel que los dos investigados tuvieron en los hechos objeto del presente procedimiento, participando activamente  en la convocatoria de las concentraciones que tuvieron lugar los días 20 y 21 de septiembre, alzándose además como sus principales promotores y directores, manteniéndose  al frente de las mismas durante too el día, llevándola iniciativa en una pretendida negociación con los guardias civiles, alentando y dirigiendo la acción de los congregados, incitándoles a permanecer en el lugar e impartiéndoles órdenes de la actuación a realizar en cada momento".

No han sido pocas las voces que he escuchado estos días aludiendo que los “Jordis” habían sido enviados a prisión preventiva por sus ideas. No oiga no, nadie en España es encarcelado hoy por hoy por sus ideas. Una cosa son las ideas y asunto distinto es la comisión de un ilícito penal. La ideas políticas, sean las que sean en España son legales, incluso las que abogan por la independencia de una parte del territorio español. Nada habría que decir al respecto. Yo intento a diario convencer a mis amigos más independentistas que no es buena cosa eso de querer desunir en vez de construir juntos” un futuro mejor. Tampoco me agrada mucho ver a los “amigos de ETA” en las instituciones que representan a los ciudadanos, y también la ley les permitió estar ahí. Cosa distinta, insisto, son las actitudes y la provocación para cometer un acto delictivo. Poco ayudó por no decir nada, ver subidos a los dos “Jordis” a un vehículo policial de la Guardia Civil, totalmente destrozado por los vándalos, y que éstos (los Jordis) arengaran a las “tropas” a seguir con “la lucha democrática y pacífica”, es cuanto menos curioso. La protesta no fue pacífica, en eso creo que no cabe la menor duda. Como consecuencia de las “concentraciones” del 20 de septiembre, la secretaria del Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona tuvo que salir de la Consejería de Economía de la Generalitat por una azotea, sí sí, como lo leen, por una azotea, mientras los más exaltados destrozaron tres todoterrenos de la Guardia Civil, causando daños cifrados en más de 135.000 euros.

Si a eso le sumas el esperpento de algunos compañeros, incluso amigos, del mundo de la política que han criticado abiertamente el encarcelamiento de los “Jordis” alegando que nunca el Gobierno debió sacar a la Guardia Civil a la calle… pues la confusión puede desgraciadamente producirse en los alejados de la política. Oiga mire usted, que no, que no se entera. Que el gobierno no sacó a la Guardia Civil a la calle, que el Ministerio del Interior se dedicó (nos guste o no) a cumplir estrictamente un mandato de los jueces. Que ventajista y que mensaje más “bonito” es decir eso de que no debieron salir a la calle los guardias civiles y la policía. Compañeros de la política, ¿Por qué no os dirigís directamente a ese juzgado a debatir esa orden? ¿Por qué e vez de publicar mensajes facilones en las redes sociales no os situáis enfrente de esa magistrado juez o de ese fiscal y hacéis una “sentada” en muestra de protesta? ¿Es que acaso no os habéis creído aún eso de la separación de poderes? ¿Es que primáis caer bien o enviar ese tipo de mensaje complaciente con los secesionistas a decirle al ciudadano la verdad, a mostrarle quien envió la orden y el por qué? Hay un amigo socialista que siempre imputa a la derecha el ser “una máquina de crear independentistas”, yo creo que con algunos de sus mensajes él también apuntala cada vez más el aumento de los nacionalistas radicales españoles, de los rancios rancios. Ese mensaje ya no cuela amigo, ya está muy gastado, ya como que parece bastante repetitivo y agotado.

Nadie está por encima de la ley, ni un Presidente de una comunidad autónoma, ni un consejero de una comunidad autónoma, ni un concejal, ni un diputado nacional, autonómico ni provincial, ni mi amigo socialista, ni tampoco en este caso los “Jordis”.

(*) Diputado autonómico en las Cortes Valencianas)