Colau transforma al niño Jesús en una silla en el Belén del Ayuntamiento

Retorna la polémica del pesebre de la Plaça Sant Jaume de Barcelona un año más. Si en las Navidades pasadas Ada Colau apostó por un nacimiento elevado, donde las figuras colgaban sobre palos de cinco metros de altura, este año es el turno de una gran mesa y unas "sillas personificadas".

Según el consistorio, el pesebre adopta el concepto de comida familiar como temática central de la obra. Por este motivo, todas las figuras se sitúan alrededor de una mesa de grandes proporciones. Una propuesta a cargo del escenógrafo Sebastià Brosa, y que el ejecutivo municipal vende como una apuesta plena de la creatividad, ternurah humor, mediante una representación abstracta de las tradicionales figuras. Destaca por ejemplo el niño Jesús, que deviene una silla de madera adornada con una corona.

Esto ha provocado reacciones contrarias como las del líder del Partido Popular en el consistorio de Barcelona, Alberto Fernández, que ha pedido la retirada del nacimiento, recordándole a Colau que un pesebre laico no existe.

Por otra parte, la web del consistorio de Barcelona introduce como "invitado de honor" y "protagonista de la Navidad" al títere de cuatro metros llamado "Señor Invierno". Esta figura barbuda ya participó ayer en el acto oficial d'encendido del iluminado y se instalará definitivamente en la Plaça Catalunya el 21 de diciembre -coincidiendo con el solsticio de invierno- hasta el 4 de enero. Entre estas dos fechas, tomará vida algunas horas para participar en un espectáculo de la compañía Efímer.

A las polémicas sobre el pesebre alternativo y el "Señor Invierno" se le suman este año a los conflictos relacionados con el encendido de la luces de navidad en la Avinguda Diagonal de la ciudad. La iluminación navideña de este tramo ha quedado pospuesta una semana a raíz de los problemas con la empresa encargada de instalarlo. Un hecho que, según los comerciantes de la zona, se ha producido por la falta de interés del consistorio.