El "perfecto cobarde": Este es el verdadero plan de Colau y Carmena para el 1-O

A estas alturas de la película del referéndum ilegal del 1 de octubre la actitud equidistante de Podemos y aledaños casi molesta tanto entre los independentistas como entre los defensores de la unidad.

En este sentido, Isabel San Sebastián desvela este jueves en su artículo de ABC lo que a su juicio son los verdaderos planes de las alcaldesas Manuela Carmena y Ada Colau: "mantener la poltrona".

Según la periodista "para cualquiera que sepa leer, la ilegalidad de la consulta soberanista objeto de disputa resulta patente a la luz del ordenamiento jurídico. La señora Carmena sabe por tanto, o debería saber, que la pretensión  del señor Puigdemont y sus adláteres entra de lleno en el terreno de lo delictivo y que ceder locales municipales para la celebración de un acto destinado a promover ese delito coloca al Ayuntamiento en un terreno cercano al de la complicidad. De ahí que el juez haya prohibido la cesión y obligado a los organizadores de la fiesta progolpista a buscar ubicación en otra parte y pagársela de su bolsillo".

Pero "nuestra alcaldesa acata pero discrepa, como hace su correligionaria Colau". 

Y es que, en su opinión, "este desafío del separatismo a la nación, la democracia, la convivencia, la ley y la lógica hay quien opta por secundar el golpe y arrostrar las consecuencias que puedan derivarse de esa conducta (inhabilitación, multa y quién sabe si cárcel); hay quien se opone a la intentona y utiliza todos los medios jurídicos y políticos a su alcance para impedir la consumación del delito y luego están los mediopensionistas que ni chicha ni limoná. O sea, Podemos y sus marcas blancas. Ellos se dicen orgullosos de ser españoles pero respaldan con entusiasmo a quienes quieren romper España". 

Recuerda San Sebastián que "se llenan la boca de la palabra democracia pero desprecian las reglas del juego que dan sentido al vocablo. Se manifiestan junto a los golpistas, suscribiendo su pretensión de robarnos la soberanía, pero les falta valor para jugarse el puesto. Ellos nadan y guardan la ropa. Representan en esta tragedia el papel del perfecto cobarde". 

Concluye que "Manuela Carmena no cederá el local municipal prometido a los patrocinadores del referéndum ilegal y Ada Colau no facilitará las instalaciones del Consistorio barcelonés para la celebración del mismo aunque una y otra dicen apoyar el presunto derecho de los independentistas a decidir unilateralmente el destino de Cataluña y de España. Los votos y la poltrona pesan más que las convicciones. El coche oficial prevalece sobre la ideología".