Echávarri imita a D.Alperi y promueve a su concejal de Urbanismo como sucesora

La historia se repite. Díaz Alperi dimitió para que su concejal de Urbanismo, Sonia Castedo, le sucediera. Diez años después Echávarri se ofrece a dejar el cargo sólo si le sustituye Eva Montesinos, que también lleva Urbanismo.

En 2008 el alcalde popular Luis Díaz Alperi dimitió para que su entonces concejal de Urbanismo, Sonia Castedo, le sucediera. Para conseguirlo necesitó de una reunión a cuatro bandas con Francisco Camps (a la sazón presidente de la Generalitat y del PPCV) y José Joaquín Ripoll (número dos de la candidatura municipal). A Ripoll le tocaba relevar a Díaz Alperi en caso de que dejara el cargo.

Pero los otros tres comensales le convencieron para que renunciara a su derecho a la sucesión. Y Ripoll cedió en favor de Castedo a pesar de haber estado enfrentado a sus tres compañeros de mesa durante la guerra interna entre campistas y zaplanistas. Ripoll, hombre de confianza de Eduardo Zaplana y entonces presidente de la Diputación, renunciaba así a su sueño de toda la vida: ser alcalde de su ciudad.

Diez años después, y con Díaz Alperi y Sonia Castedo procesados por presuntas irregularidades urbanísticas, la historia se repite, pero con alcalde y concejala delfinesa de urbanismo. En este caso, socialistas. Gabriel Echávarri, que tiene dos imputaciones por posible prevaricación, ha anunciado que dejará su cargo (cuando se le abra juicio oral, en un mes o mes y medio, su partido tiene previsto echarlo) si se garantiza su sustitución por su responsable de Urbanismo, la también socialista Eva Montesinos.

Echávarri, que ha convocado este lunes a los medios para monologuearles (no ha admitido preguntas), ha anunciado que “no se van a reeditar tripartitos ni se van a reeditar fracasos", y ha insistido: “quince votos única y exclusivamente para que Eva sea alcaldesa. Sin ninguna condición. En caso de que ese día y solo ese día, no haya 15 votos continuaré como alcalde hasta el final del mandato”. Sin ninguna condición, dice. Excepto la de quien ha de ser su sucesor.

Ya hay negociaciones en curso. Natxo Bellido ha confirmado que Compromís estará “en la búsqueda de soluciones” y ha asegurado su voto a favor de un nuevo alcalde progresista “lo antes posible”. Todo, antes de que el PP, el partido más votado en 2015, vuelva al poder.

El voto de la tercera pata del ex-tripartito, el de Guanyar, no parece tan probable visto que este mismo domingo su exportavoz Miguel Ángel Pavón comparó a Echávarri precisamente con Castedo: “la historia” que se vivió con Sonia Castedo al frente de la alcaldía de Alicante en la anterior legislatura “se repite de nuevo con el todavía alcalde Gabriel Echávarri”, dijo.

Desde el PSPV, su secretario general, Ximo Puig, ha afirmado que Echávarri no se presentará a la reelección como secretario local del PSPV en la asamblea del próximo 24 de marzo. El portavoz del PSPV-PSOE, Jorge Rodríguez, había señalado previamente que el partido puede decir “lo que quiera” sobre si el alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, debe optar a la reelección, pero “al final quienes decidirán quién estará al frente de la ejecutiva serán los militantes a través de la asamblea”.

La imputación más avanzada que pesa sobre Echávarri es por un supuesto fraccionamiento de contratos en la Concejalía de Comercio. Sobre este caso, Puig ha señalado que, por lo que él sabe “por el momento, no hay corrupción”, si bien ha admitido que podría haber “prácticas no correctas”.