La norma catalanista que el Barça le impuso a Neymar para ser uno de los suyos

Corrupción entre particulares, estafa y evasión de impuestos. Estos son los cargos que se le imputan en España y en Brasil, de manera paralela, a la familia Neymar por el fichaje del jugador por el FC Barcelona. Uno de los traspasos más truculentos del mundo del fútbol internacional vive este lunes un nuevo capítulo tras la aparición en escena del contrato íntegro y en español que el delantero firmó con el club.

Neymar recibió 8,5 millones de euros como contraprestación cuando se unió al conjunto catalán, mientras que en la actualidad recibe 5 millones de euros por temporada y el club le asegura que percibirá un total de 45.900.000 euros brutos al término de la quinta temporada, según desveló el portal Football Leaks.

Integración en la sociedad catalana por encima de todo

Una de las exigencias que más controversia genera entre las cláusulas añadidas por el equipo es la obligación de aprender catalán por ser un "vehículo fundamental" para la integración en la sociedad catalana. Para ello, el propio FC Barcelona se comprometió a darle facilidades al delantero para "favorecer esta integración, formando al jugador en el conocimiento del catalán", el cual debe "hacer los máximos esfuerzos para ello". 

Lo que no puede hacer Neymar, supuestamente

Como viene siendo habitual en los contratos de futbolistas, el brasileño tiene prohibido conducir motos, motos acuáticas, esquiar, escalar o volar en parapente. Una serie de actividades consideradas "de peligro" para no poner en riesgo su estado físico.  Además, también deberá evitar las "actividades que restrinjan el necesario descanso físico", algo que choca con la permisividad del club demostró hace algunas jornadas cuando le permitió una ida y vuelta fugaz a Brasil, aprovechando una sanción, para asistir al cumpleaños de su hermana Rafaella. 

Otro de los "deberes" impuestos por el club que llama la atención es la obligación de medirse solo con "cuantías económicas de escasa importancia" en juegos o apuestas de usos sociales de carácter tradicional, donde se incluirían destrezas como el póker. De esta manera, Neymar tiene prohibido "arriesgar cantidades de dinero u objetos económicos evaluables" que puedan manchar la imagen del propio jugador o los intereses del FC Barcelona. 

Por otro lado, si Neymar decidiera abandonar el club deberá abonar al contado en la fecha de cese al club 190 millones de euros más impuestos, si los hubiera. Sin embargo, si el jugador brasileño decide abandonar su condición de deportista profesional no deberá pagar la indemnización mencionada anteriormente, pero deberá compensar al club con el reintegro de la inversión no amortizada por el club según criterios objetivos.