| 23 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Manuela Carmena en un acto de Podemos junto a Pablo Iglesias
Manuela Carmena en un acto de Podemos junto a Pablo Iglesias

Carmena echa una mano a Iglesias con una decisión que roza el fraude electoral

La alcaldesa de Madrid había prometido no entrar en campaña. No ha ido a mítines pero ha ideado una sucia artimaña desde el Ayuntamiento que favorece con descaro los intereses de Podemos.

| Benjamín López Opinión

Manuela Carmena se ha lanzado sin freno a una campaña de anuncios con tufo electoral que roza el fraude. Así le echa un cable a Pablo Iglesias y, de paso, muerde la mano que le da de comer, la del PSOE, que es quien le ha dado la alcaldía y quien le sustenta en ella.

Y es que en las últimas horas, a pocos días de las elecciones, el Ayuntamiento de Madrid ha anunciado la bajada del IBI a casi 400.000 familias de determinados barrios de la capital en los que casualmente ganó la formación filial de Podemos; también ha presentado un programa de 16 millones de euros en ayudas a la rehabilitación de viviendas, bautizado como MADRE, y un plan de empleo de seis meses para 400 jóvenes de los distritos de Puente y Villa de Vallecas que repararán espacios públicos deteriorados, cuidarán jardines y parques y harán tareas de limpieza por el módico precio de 655 euros, el SMI. Para que luego hablen de empleo precario.

A todo esto se puede sumar el inminente anuncio este mismo miércoles de un acuerdo del Ayuntamiento con el Atlético de Madrid sobre la llamada 'operación Calderón' que incluye la recalificación del suelo del actual estadio para la construcción de viviendas.

Y todo eso sucede, ¡qué casualidad!, a cinco días de las elecciones y con un tufo partidista que apesta a kilómetros de distancia. Por ejemplo, la bajada del IBI nos la venden ahora a pesar de que no se aplicará hasta 2017 y, por si fuera poco, se anunció ya por lo 'bajini' en marzo y ahora se vuelve a lanzar a bombo y platillo como si fuera una novedad. Lo del Calderón, tres cuartos de lo mismo. El asunto lleva años atascado pero el destino caprichoso ha querido que se llegue a un acuerdo en plena campaña electoral.

La jugada de Carmena ha puesto en alerta a la oposición; el PP y Ciudadanos dudan de que anuncios de este tipo en periodo de elecciones se ajusten a la Ley Electoral que afirma en su artículo 50 que "desde la convocatoria de las elecciones y hasta la celebración de las mismas, queda prohibido cualquier acto organizado o financiado, directa o indirectamente, por los poderes públicos que contenga alusiones a las realizaciones o a los logros obtenidos" así como "cualquier acto de inauguración de obras o servicios públicos o proyectos de éstos, sin perjuicio de que dichas obras o servicios puedan entrar en funcionamiento en dicho periodo".

"Artimaña" para vulnerar la ley electoral

Carmena tira de cinismo, se disfraza de abuelita de Caperucita Roja que no ha roto un plato en su vida y utiliza la excusa de que su formación, Ahora Madrid, no concurre a las elecciones y que el ayuntamiento no va a detener su actividad. Es decir, se agarra a las siglas y la literalidad de la ley y se hace la tonta, como si Podemos y Ahora Madrid no fueran dos caras de un mismo partido.

De hecho este martes, la formación madrileña ha organizado un mitin de apoyo explícito a la matriz, a Podemos, en la Plaza de Isabel II de la capital. Es decir, el hermano pequeño apoyando al mayor con la presencia de muchos concejales 'podemitas' del consistorio madrileño como Celia Mayer, Javier Barbero, Nacho Murgui y Mauricio Valiente, entre otros.

El mosqueo del PSOE es antológico. Están que muerden porque la estratagema de Carmena no solo es una artimaña para burlar la ley electoral sino que fortalece a Iglesias y, por lo tanto, perjudica a Sánchez. Sienten que la alcaldesa les traiciona a pesar de que les debe su puesto y depende de ellos para seguir en el despacho del palacio de Cibeles. Se lo tienen merecido porque el que se alía con los malos acaba mal tarde o temprano. En esta ocasión parece que muy temprano.