| 20 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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El "trasero" de Teresa Rodríguez revienta a Iglesias y Errejón por hipócritas

La dirigente andaluza ha dejado en evidencia el verdadero bochorno de un partido que utiliza el lenguaje de género como si no fuese más que una capa de pintura para ocultar la realidad.

| ESdiario Medios

Según la coordinadora de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, el problema del partido morado es que hay un exceso de testosterona y por eso su intención de presentar en Andalucía una sola lista de izquierdas, al margen del PSOE, no ha salido adelante.

Y Javier Caraballo toma el testigo desde su columna de El Confidencial para hacer hincapié en todas las contradicciones y la hipocresía feminista que se esconde bajo un baile de palabras que no son más que eso.

Recoge el periodista la frase de Rodríguez en sus redes sociales: "La testosterona pesa más que la unidad, la fraternidad y la responsabilidad” y recuerda que "nadie podría haber dictado una sentencia más demoledora sobre una formación política que subraya, por encima de todas las cosas, su carácter feminista; se llaman Unidas Podemos pero, según esta dirigente, en su interior manda la testosterona. Y, además, lo hace sobre el resto de valores universales de los movimientos de izquierda, como la unidad o la fraternidad".

"Si de verdad se cree lo que dice, lo que no se entiende es cómo Teresa Rodríguez sigue perteneciendo a esa formación", ironiza en voz alta.

No obstante, recalca, lo de la dirigente andaluza no es la excepción en un partido morado como el movimiento feminista desde que se fundó. Ya en octubre de 2014 cuando Pablo Iglesias se subió a la tribuna de Vistalegre afirmó que "soy un militante, no un macho alfa, y me pongo a las órdenes de la mayoría".

Aquí Caraballo echa mano de la psicología inversa que consiste en negar lo que se pretende afirmar y que provoca es el deseo inconsciente de hacer lo contrario de lo que se pide por la expectación y el morbo que se genera. 

Claro que también se acuerda de los mensajes de grupos de chat entre dirigentes de Podemos en los que, de nuevo, Iglesias intercedía en una conversación para auxiliar a algunos de los intervinientes, que se quejaban: “Vais a ver lo que es un macho alfa cuando acosan a alguien de su grupo”.

Eran los mismos mensajes de chat en los que Iglesias hablaba sobre sus fantasías sexuales con Mariló Montero, "una concatenación de barbaridades que le hubieran costado el exilio si Iglesias hubiese sido de un partido distinto" pero "el tinte de feminismo de Podemos lo salvó de la condena feminista".

Vamos, que "en cada convulsión interna de Podemos, el macho alfa siempre aparece" y en enero de este año, Lola Sánchez Caldentey, antes de dejar el partido harta de batallas internas culpó "al comportamiento de macho alfa de Iglesias y Errejón". Se quejó de que ambos han mantenido "una constante actitud de liderazgo muy tradicional, muy clásico, muy masculino, muy de ordeno y mando, muy de arriba abajo; yo creía que Podemos iba a ser otra cosa, sinceramente”.

Llama la atención que es lo mismo que ahora dice Rodríguez y por eso Caraballo llega a una curiosa paradoja: Si Podemos elige como líder a un político que ‘bromea’ con su condición de macho alfa y le disculpa todas las expresiones machistas con las que se refiere a las mujeres o al movimiento feminista, lo que no puede hacer a continuación es culpar al patriarcado de todos sus males.

¿Por qué? Porque "cada vez que una dirigente de Unidas Podemos achaca al patriarcado los males de su propia organización, está sumando contradicciones internas, insalvables, a una organización que se tiñe de morado y se llama Unidas Podemos; como si el lenguaje de género no fuese más que una capa de pintura para ocultar la realidad". 

Sin embargo, concluye que "a pesar de ese debate impostado, los problemas internos de Podemos no son distintos de los que se plantean en otros partidos políticos. Son problemas consustanciales al ejercicio del poderLa envidia, el juego sucio, la traición, la deslealtad no pertenecen al patriarcado sino a la condición humana". 

Por eso resume que "mientras que en Unidas Podemos sigan pensando que el patriarcado es la fuente de todos sus problemas, con lo fácil que es culpar de todo a la testosterona, seguirán sin enterarse de nada de lo que les ocurre porque seguirán viviendo del fetiche y de la fantasía. Ya lo dijo un humanista y moralista del Renacimiento francés, Michel de Montaigne: “Por muy alto que sea el trono, siempre estará usted sentado sobre el culo”. Culo de hombre o culo de mujer, culo al fin"