| 20 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Iglesias renueva su pulso a Sánchez.
Iglesias renueva su pulso a Sánchez.

Podemos agita la tensión en el Gobierno y presiona con asfixiar a Sánchez

Los morados siguen aireando en público sus discrepancias con algunos miembros del Ejecutivo de Sánchez, incluso ha habido una discusión en el Congreso entre Montero e Iglesias

| A. J. España

Lo de lavar los trapos sucios en casa no es cosa de Podemos. Por más que Sánchez asegurase aquello de que la voz del Gobierno será una sola, el ala morada del Ejecutivo sigue intentado imponer sus criterios y aireando los desencuentros existentes en el seno del Consejo de Ministros con el objetivo de asfixiar a Sánchez.

Tanto es así que Pablo Iglesias y María Jesús Montero han tenido un encontronazo en los pasillos del Congreso,  hasta el punto de que se ha oído a la portavoz pedir al líder de Podemos que no sea "cabezón", mientras transcurría el debate en el Pleno del Congreso. Iglesias y Montero se han salido a uno de los salones próximos al hemiciclo para mantener una charla aparte y allí se ha producido la discusión.

El último episodio, que ha provocado este enfrentamiento es el que enfrenta a Podemos con la vicepresidenta, Teresa Ribera, a la que la secretaria de Estado para la Agenda 2030, Ione Belarra, se ha atrevido a desmentir este mismo miércoles.  En una entrevista en TVE,  Belarra se ha mostrado sorprendida por las palabras de Ribera que ha asegurado el refuerzo de la protección de las familias más vulnerables "no depende solo" de establecer en un decreto ley la prohibición del corte de suministros, y ha revelado que esa medida no fue la planteada por la secretaria de Estado de Energía en la reunión que ambas mantuvieron el pasado 4 de diciembre, y que se extendió por más de dos horas.

 "Nosotros llevamos tiempo trabajando para que la prohibición de los cortes de suministros sea una realidad en nuestro país. Tratamos de incluirlo en el decreto pero no fue posible y pensamos que ahora la prohibición de los cortes de suministros tiene que ir incluida en la prohibición de los desahucios", ha sostenido Belarra.

La secretaria de Estado se ha expresado así después de que Ribera haya reconocido su sorpresa por "una declaración un tanto extraña" de su socio de Gobierno, Unidas Podemos, sobre sus discrepancias acerca de la prohibición del corte de suministros.

La vicepresidenta ha asegurado que hay "plena convicción por parte del conjunto de integrantes del Gobierno" sobre la "necesidad de reforzar todos los mecanismos para que los consumidores vulnerables estén tranquilos", pero ha esgrimido que el fortalecimiento de estos mecanismos "no depende solo de incorporar en un decreto ley la prohibición de cortes", sino que "requiere un trabajo serio de comunidades autónomas y ayuntamientos".

Echenique pide a Sánchez que mande al "basurero" a la "ultraderecha"

Pero mientras que Belarra presionaba a Sánchez desde la televisión pública, el portavoz de los morados, Pablo Echenique, hacía lo propio desde el Congreso de los Diputados, insistiendo al presidente en que tiene "la obligación histórica de ser valiente" para cumplir su agenda social, pues es la "mejor manera" de mandar al "basurero" a la "ultraderecha" y a los que "odian a media España".

Por tanto, ha vuelto a poner encima de la mesa todos los puntos de fricción entre PSOE y Podemos, a los que ha denominado "retos inmediatos", como la "paralización" de los desahucios sin alternativa habitacional, que supuso otro cisma con el ministro Ábalos y que se saldó con la victoria de Iglesias, y la prohibición de los cortes de suministros para la población vulnerable, que ahora mismo divide al Gobierno.

Además ha añadido más leña al fugo al insistir en la necesidad de aprobar cuanto antes la subida del salario mínimo interprofesional, la mejora "profunda e imprescindible" del Ingreso Mínimo Vital o la derogación de la reforma laboral del PP, tal y como ha asegurado que figura en el acuerdo de gobierno.

Junto a ello, ha insistido en que "no va a quedar otra" que modificar el método de renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) tras el "portazo" del líder del PP, Pablo Casado, al desbloqueo del órgano judicial, obviando el intento de reconducir la situación por parte del ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, que ha acordado reunirse con los jueces para intentar rebajar el clima de tensión existente.

De hecho, Echenique ha aprovechado su discurso para remarcar aún más las posturas de Podemos, recordando a Sánchez que tiene pendiente "resolver el conflicto territorial mediante el diálogo", en un claro guiño a Bildu y a ERC, como contrapartida a su apoyo a los Presupuestos.

Además ha insistido en "expandir el estado del bienestar mediante una reforma fiscal a las grandes fortunas y empresas" en plena pandemia, y modernizar el modelo productivo para dejar atrás "la economía del pelotazo" o los "negocios turbios" de los "supercomisionistas inviolables que comparten testaferro en Suiza con la Gürtel", en alusión al Rey Emérito. Es, en definitiva, el programa de Podemos, que quiere imponer a toda costa, aunque sea asfixiando al propio Sánchez, que es consciente de que sin el apoyo de sus socios, tendrá que salir de la Moncloa

Las tensiones siguen en el seno del Consejo de Ministros

Aunque tanto el PSOE como Unidas Podemos han abogado en las últimas semanas por normalizar sus discrepancias, lo cierto es que los desacuerdos entre los socios de la coalición siguen generado importantes tensiones entre algunos Ministerios. 

Además de las diferencias con Ribera, están inmersos en un tira y afloja sobre la conveniencia o no de subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) en 2021, y la cuantía, que protagonizan principalmente el ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz, desde Unidas Podemos, frente al de Economía de Nadia Calviño y al de Hacienda, de la propia Montero.

Y todo esto, después de que hace menos de un mes la ministra de Defensa, Margarita Robles, y la misma Ione Belarra, se cruzaran públicamente duros reproches a cuenta de las posturas enfrentadas sobre la forma de paralizar los desahucios o el Sáhara Occidental.