Sánchez no dimite y adelanta Congreso y primarias entre el estupor general

Pedro Sánchez no se da por aludido tras el batacazo sin precedentes en el País Vasco y Galicia y mantiene su pulso a los barones. Tal como esperaba el sector crítico con el secretario general y había informado ESdiario el pasado viernes, el líder socialista ha comunicado sus intenciones próximas ante la permanente -la versión reducida- de su Ejecutiva Federal.

Según han confirmado fuentes socialistas, Sánchez ha anunciado ante su dirección -en una reunión inusualmente larga y tensa- su decisión de adelantar a diciembre la celebración del 39 Congreso Federal del partido, y en octubre serán las primarias para la secretaría general. Con esta decisión -que debe ser ratificada por el Comité Federal del sábado-, el líder socialista incumple su promesa ya que se había comprometido ante los dirigentes territoriales a priorizar la formación del gobierno de España antes que la renovación pendiente de los órganos del partido. "Los tiempos del PSOE se tienen que acompasar a los tiempos de España", dijo el pasado 26 de marzo.

Si se cumple el calendario propuesto por Ferraz, que ha encontrado una fuerte contestación interna, las primarias se celebrarían el 23 de octubre y el Congreso, los días 2, 3 y 4 de diciembre. De forma paralela, corre el reloj hacia las terceras elecciones. Si no hay nuevo candidato a la investidura antes del 31 de octubre, las Cortes de las XII Legislatura serán disueltas y convocados nuevos comicios.

Fuentes socialistas explican a ESdiario que la intención de Sánchez es cerrar de una vez vez por todas el frente abierto por los barones retándoles a dar la batalla por la secretaría general o para que le dejen manos libres en su estrategia. Y es que el líder ha trasladado a los suyos que cuenta con el apoyo mayoritario de los militantes. Son esos 180.000 afiliados y simpatizares que le dieron la victoria hace un año cuando derrotó a Eduardo Madina y a José Antonio Pérez Tapias.

De esta forma, Sánchez deja sin capacidad de maniobra a su gran rival, la presidenta andaluza, Susana Díaz, quien tendría que abandonar el gobierno de la Junta si quiere disputar la carrera orgánica por el liderazgo del socialismo. Antes de conocer las intenciones de Sánchez, el secretario de Política Federal del PSOE, Antonio Pradas -el hombre de Díaz en Ferraz- había defendido que los socialistas tienen que "intentar cambiar el rumbo" del partido para "corregir" la situación a la que han llegado, tras unos "malos" resultados electorales ante los que ha pedido hacer "autocrítica y no poner paños calientes".

"Lo primero que tenemos que hacer es analizar los resultados de ayer, que son unos resultados malos, sin paliativos", ha defendido Pradas, de hecho el número tres del PSOE, que ha subrayado que, a su juicio, el partido "debe hacer hoy una autocrítica y no poner paños calientes". "Venimos dispuestos a hacerlo y en base al análisis que se haga, mantendremos una posición", ha dicho, emplazándose así a escuchar primero la valoración que haga el secretario general, Pedro Sánchez, ante sus compañeros a puerta cerrada.

Mucho más crítico con Sánchez fue el secretario de Organización de los socialistas andaluces, Juan Cornejo, quién advirtió de que "no es el momento de celebrar congreso sino de asumir responsabilidades políticas". Cornejo ha criticado que parece que "la dirección del partido trata de esconderse detrás del congreso exprés para no hablar de lo que se tendría que hablar", la situación del partido y los resultados "nefastos" electorales en Galicia y País Vasco este 25 de septiembre.

Peticiones de dimisión

Mientras el debate se enrarece, este lunes llegaron las primeras peticiones expresas de dimisión de Sánchez. El concejal en el Ayuntamiento de Madrid Antonio Miguel Carmona ha afirmado este lunes que si él fuera el secretario general dimitiría tras los malos resultados electorales acumulados en las últimas citas electorales.

"Yo si fuera Pedro Sánchez dimitiría", ha manifestado Carmona para señalar que él no pide la dimisión del secretario general pero sí explica que si estuviera en su lugar, pondría el cargo a disposición del partido.

En declaraciones a Onda Madrid, Carmona ha trasladado su "tristeza" y "consternación" por los "gravísimos" resultados electorales del PSOE en País Vasco y Galicia, para añadir que se suma a la "preocupación evidente" sobre el "futuro" de la formación.

En esta misma dirección, el diputado Eduardo Madina ha exigido la asunción de "responsabilidades" por el "inmenso hundimiento electoral" registrado por el partido en los comicios vascos y gallegos de este domingo. Ha reclamado también un 'cambio de rumbo' en la organización -el mismo término que han utilizado los socialistas andaluces este lunes- y ha avisado de que un Congreso Federal ahora aboca a "nuevas elecciones".

Y el PSOE de Castilla-La Mancha ha asegurado que "no se puede esconder" la responsabilidad de unos resultados electorales "tan negativos" en un "congreso exprés".