El Gobierno y el PSOE se unen para arruinar la última sucia propaganda de ETA

La escenificación en el Congreso de los diputados entre Gobierno, PP y PSOE a cuenta del último anuncio de ETA de “entregar las armas de Francia” no tiene precedentes. El presidente del Gobierno aplaudiendo la intervención del portavoz socialista, Antonio Hernando, y los diputados socialistas, empezando por su portavoz, aplaudiendo la intervención de Mariano Rajoy.

No hay fisuras en este asunto. Y sirve para cortar de raíz los cantos de sirena que algunos se apresuraron a entonar el pasado viernes cuando alguien en Francia dijo que ETA iba a entregar las armas que tenía en territorio galo. Incluso algunos se atrevieron a diagnosticar que el discurso del PSOE en esta ocasión, y para desgastar al Gobierno, iba a utilizar un discurso parecido al utilizado por el PNV y el lendakari, quienes pidieron “altura de miras” al Ejecutivo ante el anuncio que se iba a producir. Nada de eso.

PP y PSOE han desactivado la expectación del anuncio de ETA del 8 de abril

No hay margen contra los terroristas mientras no se produzca no sólo la disolución, sino la colaboración con la Justicia y la reparación de las víctimas. Coincidencia plena que automáticamente desactiva la expectación del supuesto anuncio de ETA del próximo 8 de abril.  El portavoz del PSOE, Antonio Hernando, utilizó palabras que resonaron en el hemiciclo arrancando el aplauso de todos los diputados excepto lo de Podemos y Bildu.

Para el portavoz socialista “la memoria de las víctimas y de sus familias, de los extorsionados y los heridos siempre estará con nosotros. Y esto es lo que se propuso trasladar a las generaciones futuras. Primero se luchó contra el terror para luego definitivamente vencerlo. La victoria de la libertad, del estado de Derecho y la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”. Palabras que suscribió de la primera a la última el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, añadiendo que “nunca se negociará con ETA y nunca conseguirá beneficio alguno”. 

Podemos equipara a las víctimas de la Guardia Civil con los agresores de Alsasua

Y mientras todo ello ocurría en el hemiciclo, los diputados de Podemos y de Bildu hacían causa común para recibir a los familiares de los nueve imputados por agredir gravemente a los guardias civiles, tres de los cuales se encuentran todavía en prisión preventiva tras su paso por la Audiencia Nacional. Tras firmar un manifiesto de apoyo, la portavoz adjunta de Podemos, Ione Belarra, equiparaba a los guardias civiles y sus parejas con los agresores al señalar que los agentes son "víctimas" y que las personas que están recibiendo "un trato injusto, también". Podemos recriminaba a la Audiencia Nacional la tipificación de los hechos como un delito de terrorismo para lo que a su juicio fue "una pelea de bar".

Ante el bochorno, algunos de sus diputados prefirieron desmarcarse de esta muestra de "solidaridad" (como la calificaban los firmantes del manifiesto). Entre ellos dos que tienen un peso simbólico por sus profesiones: el juez en excedencia Juan Pedro Yllanes y el diputado gaditano Juan Antonio Delgado, quien fue durante muchos años el portavoz nacional de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC).