| 14 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Montero enfila ahora a las asociaciones de vecinos tras perseguir a las pymes

Hacienda ha emprendido una nueva campaña de cartas 'informativas' a colectivos vecinales y peñas festivas, que pertenecen a las entidades parcialmente exentas en el Impuesto de Sociedades.

| ESdiario Empresa

Tras poner la diana en las bodas, las pequeñas empresas y los comercios y los autónomos, ahora Hacienda ha enfilado a las asociaciones de vecinos. El Ministerio que comanda en funciones aún María Jesús Montero las ha convertido, junto a las asociaciones festivas, en destinatarias de su nueva campaña de cartas.

Según el Registro de Asesores Fiscales (REAF), las asociaciones de vecinos forman parte de las entidades que están parcialmente exentas en el Impuesto de Sociedades junto con otras asociaciones tan populares como: las comisiones de festejos, las asociaciones culturales, las ONG, las cofradías o los colegios de profesionales.

 

Pero si estas entidades realizan actividades económicas, tienen que declararlas. Y eso incluye hasta una peña de un pueblo, "siempre que tenga estatutos y NIF", entraría en esta clasificación y tendría que rendir cuentas a Hacienda.

De las ganancias que se obtengan por la barra de bar en las fiestas del pueblo, las de las clases de sevillanas que ofrece la asociación de vecinos, los cursos que imparte un colegio profesionales, por poner varios ejemplos, Hacienda reclama, por carta, su parte en el rendimiento de la actividad, bajo el tipo de Sociedades, que es del 25%. Las cuotas que pagan periódicamente los socios sí están exentas de Sociedades.

Como la Agencia Tributaria tiene acceso a los datos bancarios de los contribuyentes, cualquier tipo de ingreso elevado o de movimiento sospechoso que tenga la asociación de turno puede llamar la atención de Hacienda.

Con estas cartas de inevitable tono amenazante el fisco exige a los destinatarios detalles como que "justifiquen sus ingresos, gastos, sus estatutos o su objeto social", informan desde la REAF. "Lo que Hacienda quiere es que paguen de forma voluntaria sin llegar a abrir expedientes e inspecciones", lo que reduciría considerablemente el coste de la operativa para la Agencia Tributaria.