Forn quiso incriminar al coronel que coordinó el 1-O y el fiscal le dio un corte

No contento con ser el responsable político de la rendición de los Mossos en la jornada del referéndum ilegal del 1 de octubre, el exconseller de Interior de la Generalitat, Joaquín Forn jugó sucio contra el Ministerio del Interior en su declaración ante el juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena.

Según esta declaración, difundida este jueves por el diario La Vanguardia, Forn llegó a culpar de la pasiva y cómplice actuación de la Policía catalana al coordinador del Gobierno para el 1-O, el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos.

En concreto Forn -que permanece en prisión pese a ver renunciado a su escaño y al que el magistrado ha denegado en dos ocasiones su libertad-, acusó a Pérez de los Cobos de "dejar tirados" a los Mossos. El instructor no le creyó y le envío a prisión.

Según su relato ante el magistrado, los días 29 y 30 de septiembre se había acordado que el día de la votación, Guardia Civil, Policía y Mossos mantendrían cuatro reuniones operativas para organizar el cierre de los colegios, recogida de urnas y demás incidentes que pudieran ocurrir en aquella jornada. Esas reuniones fueron convocadas supuestamente por Pérez de los Cobos.

La primera era a las 9 de la mañana y según Forn los únicos en asistir fueron los Mossos. "Cuando el mayor Trapero se lo hizo saber a Pérez de los Cobos, le dijeron que se habían olvidado de la reunión y que el resto quedaban desconvocadas”, siempre según el exconseller.

El coronel que coordinó el 1-O tira de la manta en el Supremo y hunde a Trapero y Forn

Pese a las múltiples evidencias que obran ya en el propio Supremo, la Audiencia Nacional y varios juzgados de Cataluña, Forn aseguró que "siempre" se cumplieron todos los mandatos judiciales y que ya cuando asumió el cargo el 14 de julio de 2017,  advirtió a Carles Puigdemont, que los Mossos cumplirían la ley.

Forn relató a Llarena que el expresidente fugado le dijo: "Haz lo que tengas que hacer". Pero tanto el fiscal como la acusación popular, representada por Vox, pusieron en evidencia su hipocresía.

Fue cuando le recordaron que como conseller de Interior tenía el mandato de prohibir el referéndum por orden del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña pero sin embargo él fue a votar aquel día.