Escaparates virtuales, nuevo nicho de la industria textil

Frente al ordenador, en el tren, en la cola del supermercado, cuando un amigo o amiga se retrasa unos minutos, incluso entre la puesta del semáforo del rojo al verde, aunque peligroso e incluso prohibido pero lo hacemos, se nos van los ojos. Hemos visto ese vestido especial para la boda que tenemos próximamente. Lo vimos el día anterior y seguimos con ese color azul y dorado en la cabeza. Hacen falta solamente unos clics para adquirirlo, se nos resiste pero al final lo hemos hecho. Cada vez tendemos a comprar más ropa en Internet. Nuestros hábitos de consumo están cambiando.

Poco a poco van quedando atrás esos tiempos en los que la ropa era un aspecto local, de un lugar concreto, casi algo representativo de una cultura. A modo de ritual la gente iba una vez al mes a la ciudad más grande que había en un radio no mayor de dos horas en coche o en transporte público, y compraban la ropa de temporada. Por otro lado, también son conocidos los viajes a India u a otros países de Latinoamérica, que hacían los dueños de tiendas físicas que querían ofrecer un producto diferente para asegurarse una clientela.

Esa era una estrategia de fidelización muy importante de cara a tener un negocio sostenible en términos de rentabilidad. Estos empresarios de la industria textil cargaban con un montón de ropa para luego venderla en su lugar de residencia. Actualmente, ni la gente tiende a desplazarse a su ciudad más próxima solamente para hacerse con ropa del lugar, y los dueños de tiendas medianas o pequeñas no se recorren millones de kilómetros varias veces al año, sobre todo en la temporada alta de invierno-verano, para comprar ese pantalón de lino ancho o bombacho de lana gorda que solamente lo tienen en un pueblecito de la India.

Nuevas necesidades, nuevas soluciones…

Ahora los empresarios van a la India de viaje de negocios, es decir, entablan una relación con un comerciante local y se lanzan a internacionalizar su negocio con la creación una página web en varios idiomas (el local y el inglés sobre todo). Además, dos direcciones en el directorio de una página web que pueden ser la de los lugares de venta y el lugar de la producción añaden más seriedad al producto, en este caso a las prendas que queramos poner en venta.

Sin embargo, hablando claro, lo que está revolucionando realmente el mercado online es la capacidad de tener varias ventanas abiertas que a modo de “escaparates virtuales”, nos permiten comparar casi a golpe de vista: modelos, precios, colores y otras variables. Solamente tenemos que teclear desde el lugar-tiempo que nosotros queramos teniendo en cuenta que solamente nos hace falta estar conectados.

Para seguir al hilo de las nuevas necesidades no podemos olvidar la crisis económica que está aún atravesando nuestro país. Crisis que tiene varios focos de acción y tal vez el más profundo es la crisis estructural, y el cambio de una tercera a una cuarta revolución industrial. Las nuevas generaciones parecen tenerlo claro, y sobre todo en el mercado de la industria textil, ya que para poder competir con las grandes marcas tener un portal online con tus modelos es una de las soluciones más demandadas.

 Salto tecnológico

Como poco a poco se está gestando esta economía 2.0 y ante la nueva necesidad, las empresas de tecnología, en este caso concreto en las que se dedican a montar páginas web, como es el caso de  la alemana 1and1, se han puesto las pilas con los servicios que ofrecen, y han pasado a cumplir en un periodo corto de tiempo algo así un poco como el papel del INEM. Esta metáfora de cuando se informa a los trabajadores cómo deben presentarse a una entrevista o qué papeles necesitan para darse de alta como freelance. Las empresas de tecnología asesoran y ofrecen sus plataformas personalizadas para que dar el salto no sea solamente para unos pocos y  hacer de este momento una oportunidad.

Contar con presencia en Internet se está convirtiendo en un requisito indispensable y aunque no lo creamos es una de las maneras de hacer frente a los grandes de la industria textil.  Modistas, y diseñadores de muchos lugares del mundo cuentan ya con una página de moda online y ofrecen sus productos totalmente personalizados… tal vez se los pueda conocer en privado en algunas de sus exposiciones en mercados internacionales de grandes ciudades como Berlín, Madrid, Paris, Londres, ya que ésta es la nueva fórmula de las tiendas físicas. Lo que sigue sin pasar de moda también es el “boca a boca”  como por ejemplo ese vestido de tu amiga de un diseñador totalmente desconocido de un pueblo perdido en el báltico, que conociste en tus últimas vacaciones de mochilera y que está vistiendo a gente desde China hasta la costa oeste de California.

Tal vez más que nunca tenemos la oportunidad de democratizar lo que queramos llevar puesto, es cuestión de saber cómo debemos posicionarnos con nuestra página web como vendedor, o saber encontrar la prenda correcta en el mar de posibilidades que es Internet.