| 25 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Puigdemont levanta el pulgar en señal de victoria.
Puigdemont levanta el pulgar en señal de victoria.

Ciudadanos se consolida como el único capaz de doblegar al independentismo

"Una victoria histórica, pero melancólica". De esta forma define un diputado de C'S en ESdiario la incontestable victoria de la líder naranja, que aun así se augura insuficiente.

| Javier Ruiz de Vergara España

Lo resumía a la perfección en declaraciones a ESdiario un diputado de C's en el Congreso. "Inés ha obtenido una victoria incontestable e histórica, pero melancólica". Y es que Arrimadas pese a ganar con holgura este 21-D no va a gobernar.

Un ley electoral obsoleta y que beneficia desde hace décadas al nacionalismo y una nueva alianza entre Puigdemont y Junqueras va a impedir la fotografía histórica de ver entrar a Inés Arrimadas en el Palacio de San Jaume investida como la primera mujer presidenta de la Generalitat. Y eso que la joven líder de Ciudadanos ha completado en tiempo récord una hoja de servicios impecable.

En apenas cinco años desde su entrada en política de la mano de Albert Rivera, Arrimadas ha convertido un partido minúsculo nacido como ariete contra el nacionalismo de la antigua Convergencia apuntalada en el pujolismo en la primera fuerza política de Cataluña en votos y escaños. 

 

Y lo ha hecho, además, con un  crecimiento sin precedentes en la aritmética del Parlament. De los 3 escaños que Albert Rivera logró en 2006 cuando nació la formación naranja hasta los 37 que Arrimadas firma este 21-D. Entre ellos, C's ha obtenido tres en 2009; 9 en 2012, y 25 en 2015.

Pero la ficha de esta jornada electoral dejan unas cifras de éxito indudable: un millón de votos, y más de 150.000 de ventaja sobre la lista de Junts per Catalunya, que encabeza Puigdemont.

Todo, tras una campaña en la que Arrimadas ha sufrido ataques brutales desde el nacionalismo -Nuria de Gispert la llegó a instar a abandonar Cataluña-, coacciones de todo tipo e insultos como "facha", incluso este jueves a las puertas de su colegio electoral.

Arrimadas, este jueves, en el momento de depositar su voto en Barcelona.

 

Con los resultados de esta jornada electoral se demuestra además que con su discurso transversal desde una indiscutible firmeza contra el independentismo, ha logrado seducir a electorados tan distintos como los del PSC y el PP.

De hecho, uno de los datos más significativos este 21-D se ha registrado en el feudo histórico del PSOE, el denominado cinturón rojo de Barcelona que aupó en su día a Felipe González y a José Luis Rodríguez Zapatero al Palacio de la Moncloa. Localidades como Santa Coloma de Gramanet, Cornellá, San Cugat del Vallés o Badía del Vallés, en las que Arrimadas ha arrasado literalmente.

Lo mismo ha ocurrido en el caladero de votos que el PP conservaba en Barcelona, parte de Tarragona y Girona, que ha acabado de forma mayoritaria en las urnas de la formación naranja.