| 06 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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La mayoría de edad llega a Enofusión

Con una organización perfecta y conceptos rompedores como los del Wine Corner, la última edición de la feria por excelencia del vino ha demostrado estar en su punto justo de madurez.

| Rafael Rincón JM Gastronomía

No ha habido ni retrasos reseñables en las catas y todo ha rodado de manera fluida sin estrés en la organización y con en el público asistente este año a la 8ª edición de Enofusión. La innovación ha recaído en el concepto de Wine Corner donde el Productor presentaba un par de sus vinos a un reducido grupo de personas en medio del fragor de Madrid Fusión.

Para ello se dotaba al catador de un pequeño aparato con un auricular, tipo el que sirve de guía en los museos, que recibía la voz del Bodeguero y hacia posible escuchar sus explicaciones con total comodidad. Buena y ágil solución. En cuanto a las catas, también este humilde crítico ha llegado a su mayoría de edad y se ha dosificado asistiendo a lo que a priori pudiera ser más interesante a cualquier lector.

Comencé con una cata ineludible bajo el epígrafe: "Desvelando el misterio, González Byass y sus Palos Cortados". En ella, flanqueado por dos de sus palos cortados más conocidos: Leonor y Apóstoles, se cataron los de las añadas 1994 ▪ 1987 ▪ 1978 y 1967.

Los primeros, son palos cortados de cabecera y ejemplo del buen hacer de Gonzalez Byass. El Leonor es un vino de 12 años que se puede conseguir por unos 20€ y en el que olfativamente encontramos los tofes con ligeros toques de cáscara de naranja y los frutos secos propios de un amontillado mientras que en el paladar constatamos toda la perfección que se pueda encontrar en un oloroso finísimo con la amplitud y delicadeza que presentan este tipo de vinos.



El Apóstoles es un palo cortado de más de 30 años en el que se amplifican la concentración y por lo tanto las bondades del Leonor. Poco más que decir. Ambos son grandes vinos que no decepcionarán ni al principiante ni al avezado. En cuanto a los palos cortados de añada anteriormente descritos, son vinos de los que dejan marca indeleble en el aficionado de perfil "loco por el jerez", pero que debido a su precio por encima de los 250€, a su escasez y a su complejidad, los hacen menos recomendables para el común de los mortales, aunque como experiencia resulten inolvidables. Cata puramente emocional, como suele pasar con los jereces

"La Sastrería: Armonías de afinidad y contraste"

El excelente equipo encargado de la selección de vino en Makro integrado por el gran sumiller Custodio Lopez Zamarra y la Directora de Compras del grupo Marta Modrego entre otros, ha dado un paso más con su segunda versión y bajo la marca de vinos de calidad "La Sastrería".

Orientados como siempre al sector HORECA y con una relación calidad/precio envidiable han sacado una colección de la españolísima garnacha, pero de diferentes DO's de la geografía española, donde el aficionado puede ver como esta casta transmite a la perfección las características de los diferentes terruños en donde se planta. Vinos con tantas notas comunes como distintas. Muy curioso.

Un proyecto de los que me gustan en los que todo el mundo gana desde el viticultor al consumidor final. Las marcas que han sacado son ▪ Sastrería Montsant ▪ Sastrería Rosado Cariñena ▪ Sastrería Rosado Aragón ▪ Sastrería Madrid ▪ Sastrería Rioja y Sastrería Priorato.

"Sabores del volcán: vinos y quesos de Canarias"

Esta fue otra de las catas que me llamó la atención. Aun preciándome de conocer los productores de moda del archipiélago en Madrid, esta cata iba a cubrir mi desconocimiento de las gamas medias. Viñedos de minifundismo, de variaciones climatológicas acusadas que van del subtropical al desértico pasando por el de alta montaña, hacen de los vinos canarios un abanico de diferentes sensaciones.

Viña Arese (blanco) de la DOP Abona. Una nariz explosiva de la listán blanco junto a otras variedades que empequeñece al Brumas de Ayosa (blanco semidulce) de la DOP Valle de Güímar , moscatel seco muy correcto  ▪ Pagos de Reverón (rosado) de la DOP Abona muy bien hecho y un Marba barrica (tinto), de la DOP Tacoronte-Acentejo donde la listan negro se muestra de forma prácticamente perfecta . Finalizamos con un Malvasía Testamento Esencia (naturalmente dulce), de la DOP Abona que fue el broche perfecto.



"Los nuevos vinos de la DO Rueda"

Nunca hubiera puesto este nombre a esta cata donde el Robert Vedel Cepas viejas 2015 no solo es un pedazo de vino, sino que para mí Pepe Herrero Vedel lleva haciéndolo 15 años bajo diferentes marcas. Nada nuevo bajo el sol, ni falta que hace  habiendo sido un producto excelente durante todos estos años... Lo mismo ocurre con el De Alberto Dorado– Bodega Hijos de Alberto Gutiérrez un crianza menos biológica que oxidativa al estilo de Jerez en parte que se hacía desde hace unos cuantos decenios y que merece un artículo en exclusiva. Para orientarnos, este verdejo se pone al aire libre durante meses dentro de unas damajuanas para que se oxide y después pasa por un sistema de criaderas y soleras en roble. Impecable.

El Carraviñas Espumoso Brut– Bodega Félix Lorenzo Cachazo es un espumoso que podría ser competencia de muchos cavas y el Castelo de Medina Fermentado en barrica 2014 mucho más que correcto con una madera muy bien aplicada a esta excelente uva. En resumen una cata para disfrutar que puede que quiera decir con el "nuevos vinos" el que ninguno usa las levaduras aromáticas que daban notas a mangos y piñas en los verdejos de hace algunos años y que eran norma.

Jaime I Jiménez
Catador
La Nariz de El Trotamanteles