¿Por qué Vox no busca publicidad ni propaganda? Aquí está la clave de su éxito

A medida que pasan las semanas parece claro que Vox no "rebusca publicidad ni se afana en la propaganda". Tal como señala José Alejandro Vara este miércoles en su columna de VozPópuli, "Santiago Abascal apenas aparece en los medios. De cuando en cuando desborda un teatro, atesta un salón de actos o inunda un palacio de Congresos. Sin aspavientos ni apenas trompetería" pero "raramente concede entrevistas, ni incurre en canutazos, ni comparece en los platós. Va a su bola, por libre".

Y todo esto tiene, a su juicio, una fácil explicación: "Todo se lo dan hecho. Gratis total. La marca Vox se crea sola". 

Como ejemplo, el periodista señala que durante los Goya, Abascal estaba con su gente en Toledo: "Naturalmente, no le habían invitado a la gala, pese a ser en la capital andaluza, donde su partido cuenta con una 12 de escaños" pero es que "nunca pensó en acudir" entre otras cosas porque "en ciertos ambientes, su ausencia es muy solicitada".

Y sin embargo todos los allí presentes dieron "unánimemente en hablar de Vox, en arremeter contra Vox, en ciscarse en Vox"... 

Mientras tanto, Abascal se limitó a decir "No vamos a ir a los Goya. Seguiremos viendo las películas de Clint Eastwood”. Según Vara, "al estilo de la casa, cuando Harry el Sucio retaba al malviviente negro que encañonaba a una joven con un pistolón: “Venga, va, alégrame el día”. Y se lo alegraron. Vox fue la estrella ausente de un provinciano ceremonial". 

Esta estrategia le funciona a Vox de perlas, cree el periodista: "No tiene líderes conocidos, ni dirigentes de renombre, ni siquiera ha desginado aún a sus candidatos. Nadie sabe cómo se llama su hombre en Andalucía, el de los 12 escaños. Ni quién será su cabeza de cartel en Madrid"...

Sólo "lanza un tuit cada noche para comentar los episodios de la jornada. Y así va soltando pildoritas, en pausadas entregas, con la acidez suficiente para escocer lo justo y tocar donde duele. Y no hace más. Una estrategia minimalista que, a tenor de la demoscopia, funciona como un tiro" porque "siempre hay alguien dispuesto a alegrarle el día"...